El olor del mantecado de Estepa aspira a convertirse en Patrimonio Inmaterial de la Unesco

El Ayuntamiento de Estepa (Sevilla), la Indicación Geográfica Protegida Mantecados y Polvorones de Estepa y dos universidades públicas, la Pablo de Olavide de Sevilla y la Miguel Hernández de Elche, se han unido para conseguir que el olor a mantecado en sus calles sea reconocido como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

El alcalde de la localidad, Antonio Muñoz, ha explicado a EFE que se sigue trabajando «en una idea especial» tras recordar que muchas personas «acuden a Estepa para sentir ese aroma especial a almendra tostada y canela» que se percibe en sus calles desde varias semanas antes de Navidad, cuando se preparan sus dulces más típicos.

Muñoz ha explicado que se ha impulsado la iniciativa con el Consejo Regulador de la Indicación Geográfica Mantecados y Polvorones de Estepa y dos profesores universitarios, Antonio Luis Díaz Aguilar, titular de Antropología Social de la Olavide, y Anastasia Téllez Infantes, profesora de Antropología Social y Cultural en la Universidad Miguel Hernández, que se inspiró en las mujeres que trabajan en las fábricas de mantecados para realizar su tesis doctoral sobre género y trabajo industrial.

Con toda la documentación previa preparada, se va a impulsar «cuando llegue el momento y se abran las convocatorias» porque se entiende que «la elaboración artesanal del mantecado» merece ser declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

«Queremos mostrar al mundo lo que se vive en Estepa, una ciudad que se ha hecho a sí misma, que al final del siglo XIX y principios del XX tuvo más de 100 pequeños obradores del mantecado en su centro histórico», ha enfatizado el alcalde, que ha recordado que una de sus virtudes es que las recetas se han ido pasando «de generación en generación, de madres a hijas, y eso es digno de conocer».

Todo ello genera desde octubre un aroma en las calles «que se palpa cuando visitas Estepa», ha destacado el alcalde, que se muestra seguro de que conseguirán el objetivo, aunque «el camino sea largo, pero también va a ser apasionante».

La producción de los primeros mantecados y polvorones de Estepa de este año, unos 15 millones de kilos en total, se inició oficialmente el pasado 8 de septiembre y desde mediados de ese mes se encuentran en varios países de Europa y Estados Unidos.

La exportación es una de las bases de la rentabilidad de las 18 empresas amparadas por las Indicaciones Geográficas Protegidas (IPG) Mantecados y Polvorones de Estepa, en una campaña marcada por la subida del precio de materias primas esenciales, como la almendra y el chocolate, así como por la subida de los salarios recogida por convenio.