La inteligencia artificial a debate en el Congreso Nacional de Derecho Sanitario
La IA en la Sanidad: «Si puede predecir un infarto en los próximos cinco años, ¿cómo no vamos a utilizarla?»
La inteligencia artificial ha llegado a la Sanidad y varios actores destacados del sector han dialogado sobre los retos y los beneficios de esta tecnología
En el marco del XX Congreso Nacional de Derecho Sanitario, la Directora General de A.M.A., Raquel Murillo, moderó una mesa redonda de gran relevancia centrada en el debate sobre el uso de la inteligencia artificial (IA) en el ámbito sanitario. La sesión contó con destacados expertos como el doctor Benjamín Herreros Ruiz-Valdepeñas, el doctor Ignacio Hernández Medrano, el abogado Joaquín Ruiz Echauri y el magistrado del Tribunal Constitucional, César b. Los participantes analizaron desde diversas perspectivas los desafíos y oportunidades que la IA presenta para el sector de la salud.
La profesionalidad médica ante la IA
El doctor Benjamín Herreros destacó que uno de los problemas más importantes es que los médicos podrían dejar de pensar críticamente debido al uso excesivo de la IA. «Debemos ver el bosque y no solo los árboles», comentó Herreros, refiriéndose a la necesidad de mantener una visión integral de la medicina. Según Herreros, la IA debe verse como una «muleta» y no como una «prótesis», ayudando a humanizar el ejercicio médico en lugar de sustituirlo.
La IA debe verse como una muleta y no como una prótesisMédico especialista en Medicina Interna y en Medicina Legal y Forense
Herreros planteó tres posibles caminos a seguir: utilizar bien la IA, permitir que medie en la relación clínica o caer en una distopía donde las máquinas sustituyan a los profesionales. «Debemos ser más inteligentes y no dejar de pensar», concluyó el doctor Herreros, haciendo un llamamiento a un mayor compromiso y profesionalidad.
La era del big data
Por su parte, el doctor Ignacio Hernández enfatizó que la tecnología no necesita ser perfecta, sino práctica. «El traductor de Google traduce todos los idiomas sin conocer ninguno, simplemente reconoce patrones», explicó, resaltando el poder del machine learning. Hernández Medrano señaló que la IA aprende a través de la repetición y no por reglas, lo que lleva a preocupaciones sobre la privacidad de los datos. «Si la tecnología puede predecir un infarto en los próximos cinco años, ¿cómo no vamos a utilizarla?», se preguntó, subrayando la importancia de equilibrar la utilidad con la privacidad. Destacó también su trabajo con Savana, una empresa que crea lagos de datos desestructurados para desarrollar herramientas predictivas basadas en IA lingüística.El traductor de Google traduce todos los idiomas sin conocer ninguno, simplemente reconoce patronesNeurólogo y subdirector del Instituto de Investigación en el Hospital Universitario Ramón y Cajal
El abogado Joaquín Ruiz Echauri aportó una perspectiva legal, indicando que una normativa clara para la IA podría tardar entre tres y cinco años en implementarse. «Se trata de armonizar el derecho entre diferentes países y resolver quién es responsable si la IA se equivoca», dijo Ruiz Echauri, señalando la opacidad y la complejidad de determinar responsabilidades en casos de errores de IA. Subrayó que la industria aseguradora está rezagada en comparación con otros sectores y que los ciberriesgos no siempre involucran IA. «Lo que debemos asegurar son a los humanos detrás de la tecnología», afirmó.
Perjuicios de la IA
Por último, el magistrado César Tolosa reflexionó sobre la necesidad de encontrar un equilibrio entre los beneficios de la tecnología y los posibles perjuicios para los ciudadanos. «No podemos afirmar categóricamente que la IA mejorará la sanidad ni que solo traerá problemas», señaló Tolosa, sugiriendo que la tarea de los juristas es conciliar estas dos visiones. Lamentó la falta de regulación en salud digital, afirmando que el derecho siempre va por detrás de los avances tecnológicos. «La IA no debe convertirse en un fin en sí misma; debe servir a los ciudadanos», concluyó, advirtiendo sobre los riesgos para los derechos fundamentales.
La IA no debe convertirse en un fin en sí misma; debe servir a los ciudadanosMagistrado del Tribunal Constitucional
El debate dejó claro que la implementación de la IA en la sanidad es un tema complejo y multifacético que involucra aspectos técnicos, éticos, legales y de privacidad. Los expertos coincidieron en la necesidad de una mayor regulación y de un enfoque equilibrado que permita aprovechar los beneficios de la IA sin comprometer los derechos de los pacientes.
Esta mesa redonda se erige como un punto de partida para futuros debates y desarrollos legislativos en torno al uso de la IA en el ámbito sanitario, marcando un paso importante hacia una integración más segura y efectiva de esta tecnología en la atención médica.
