Más de un centenar de militares de la UME han colaborado durante la noche en el incendio de Tenerife
Incendios
¿Por qué el incendio de Tenerife es tan difícil de apagar?
Por el momento, el incendio forestal ha obligado a evacuar a casi 8.000 personas
El incendio de Tenerife sigue avanzando sin control causando una gran devastación en la isla. Más de 3.000 hectáreas han sido arrasadas en este fuego que fue declarado en la madrugada del martes en el monte de Arafo. Por el momento, la zona afectada alcanza un perímetro de 41 kilómetros y afecta a los municipios de Arafo, Candelaria, El Rosario, La Orotova, Santa Úrsula, La Victoria, El Sauzal y Taraconte.
Más de 200 militares de la Unidad Militar de Emergencias (UME) trabajan sin descanso por controlar las llamas. Sin embargo, las condiciones no son las más favorables para ello. La extensión de los territorios calcinados, el humo, el viento y la previsión de un aumento de las temperaturas no son muy halagüeñas y podrían hacer que el control del incendio aún tardara en llegar.
Unas condiciones desfavorables
Por el momento el incendio forestal ha obligado a evacuar a casi 8.000 personas y a realojar a más de 400 animales. Las últimas evacuaciones se han producido en El Sauzal y en Santa Úrsula, que se suman a las 3.069 personas que han tenido que abandonar sus viviendas y 3.820 que se encuentran confinadas en la localidad de La Esperanza. Según el presidente canario, Fernando Clavijo, nos encontramos ante el incendio «más complejo de los últimos 40 años en las Islas».
Para atender a la población desplazada, se han habilitado albergues en El Rosario, La Orotava, Candelaria, El Sauzal y La Matanza, donde se encuentran más de un centenar de vecinos y algunas mascotas.
Según ha explicado Clavijo, las llamas tienen una gran intensidad y la orografía del terreno está dificultando su extinción. Solo es posible llegar por medios aéreos para controlar el fuego y las condiciones no son muy favorables, debido al humo, al viento y a las altas temperaturas.
Por su parte, Pedro Martínez, jefe de servicios del Cabildo de Tenerife, explicó ayer ante los medios de comunicación que el incendio comenzó en una zona de pinar muy cerca de la dorsal y la meteorología lo empujaba hacia Santa Cruz de Tenerife y hacia las poblaciones de cotas inferiores. Por esa razón, durante la noche el ataque se concentró en detener el avance a zonas pobladas y se estableció una línea de control en la carretera de Los Loros para evitar que creciera en dirección sur.
La peligrosidad de este incendio tiene su razón en el terreno escarpado y de difícil acceso, y el calor que alimenta a las llamas, sumado al humo que afecta a la calidad del aire de los alrededores.
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