La ministra de Sanidad, Mónica García
Sanidad promete reactivar la ley de Garantías de Medicamentos que regula la telefarmacia
Se trata de una medida pionera en toda España que ayudará a eliminar las cargas administrativas y a avanzar hacia una digitalización total de los procesos
El Ministerio de Sanidad se ha prometido este martes a los farmacéuticos reactivar, «con espíritu de colaboración», la reforma de la ley de garantías de medicamentos que contemplaba, entre otras cuestiones, la telefarmacia o la dispensación no presencial de fármacos hospitalarios.
Así lo ha asegurado el director general de Cartera Común de Servicios del Sistema Nacional de Salud (SNS) y de Farmacia, César Hernández en la inauguración oficial del 23 Congreso Nacional Farmacéutico, que reunirá hasta el próximo viernes en Valencia a más de 2.000 profesionales.
«Ha llegado el momento de recuperar la hoja de ruta de las reformas», entre las que están la de la citada ley y que supone una «oportunidad para abordar aquellos aspectos que tienen que reequilibrar el sistema y orientarlo hacia los retos del siglo XXI», como el demográfico, la digitalización o la organización en torno a los pacientes y el de hacer un planeta más sostenible.
Entre esas reformas está la de la ley de garantías de medicamentos «y todo lo reglamentario que cuelga de ella» que quedó pendiente con la convocatoria de elecciones. El proyecto inicial contemplaba asuntos como la telefarmacia, la dispensación no presencial de medicamentos hospitalarios o la eliminación del copago a las personas más vulnerables.
Algo que el Ministerio quiere hacer desde el «diálogo y la colaboración continua», aunque ha reconocido que habrá puntos sobre los que van a discutir más y en los que será más difícil conciliar los intereses de todos.
Las reivindicaciones de los farmacéuticos
Hernández ha respondido así a las reivindicaciones del presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos de España (CGCOF), Jesús Aguilar, que ha incidido en que uno de los retos actuales del sector es la modificación de esta normativa.
El CGCOF va a trabajar en ella intensamente para que sea «la ley del futuro para la Farmacia», pero aspiran a que permita, entre otros aspectos, que el farmacéutico pueda sustituir la forma de un mismo medicamento por otra para evitar la interrupción de los tratamientos, como ya pudieron hacerlo excepcionalmente durante la pandemia.
También pretenden que la normativa recoja la atención farmacéutica domiciliaria para colectivos vulnerables y atendiendo a criterios de planificación y que garantice que «allí donde haya un medicamento haya un farmacéutico», como ocurre con el modelo de dispensación colaborativa entre la farmacia comunitaria y la hospitalaria.
Otro de los desafíos es «la necesaria actualización y regulación del Real Decreto de Productos Sanitarios», que los farmacéuticos esperan que sea una realidad este año y equipare los productos sanitarios con los medicamentos.
Además, Aguilar ha aludido a la futura Agencia Estatal de Salud Pública, una oportunidad para «integrar a la profesión farmacéutica en la gestión y en las estrategias de Salud Pública», al tiempo que ha reclamado «un gran papel» en la lucha contra el consumo de alcohol en menores, en la deshabituación tabáquica, en los cribados de enfermedades o en la salud mental.
Valencia eliminará el cupón precinto
En la inauguración también ha intervenido el consejero de Sanidad de la Comunidad Valenciana, Marciano Gómez, quien ha anunciado que su Gobierno está trabajando en un nuevo sistema que sustituirá el cupón precinto de las cajas de medicamentos por un código de verificación digital para así reducir los trámites administrativos en el proceso de facturación.
Una medida pionera en toda España que ayudará a eliminar «las cargas administrativas y a avanzar hacia una digitalización total de los procesos», ha valorado.
A día de hoy, los farmacéuticos tienen que recortar este cupón a cualquier medicamento recetado por un facultativo, adherirlo en una hoja y remitirlo a los colegios profesionales para la preceptiva facturación a la Conserjería de Sanidad.
Cada caja cuenta con el código datamatrix, que contiene la trazabilidad completa del fármaco, por lo que una vez adaptados los sistemas informáticos será posible que la lectura de ese código sustituya a la fórmula actual.
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