'Por huevos', la campaña por la que Igualdad pagó 1,6 millones mientras las pulseras antimaltrato fallaban

A finales de 2024, la Fiscalía alertó al Ministerio de Igualdad de que algo no iba bien con el volcado de datos de las pulseras antimaltrato. Lejos de intentar solventar el problema y dar a las mujeres la protección que el Gobierno busca, Ana Redondo desoyó las advertencias y siguió con su política contra los hombres. Para ello, cuando ya sabía lo que había con la herramienta para alejar a los hombres de las mujeres, en vez de invertir para mejorar su fallo, decidió gastar 1,6 millones en su campaña 'Por huevos'.

Según reza su Ministerio, se trata de una iniciativa para sensibilizar a la sociedad sobre la necesidad de «una transformación cultural hacia masculinidades más igualitarias y corresponsables». Así, en el documento asegura que es una «expresión muy asociada al universo masculino», al que se ha dado la vuelta «con sentido del humor, resignificándola».

La campaña, protagonizada por el actor Paco León, busca, tal y como apuntan en la web, sensibilizar a los hombres sobre la necesaria «implicación en cuestiones como los cuidados, o la lucha contra las violencias contra las mujeres». Y es que, según reveló Redondo, existen varios datos «preocupantes» que señalan que, entre los hombres jóvenes, el apoyo al feminismo ha pasado del 54 % en 2019 al 41 % en 2023, y a la igualdad de género del 70 % al 50 %. Además, el 23 % de los hombres jóvenes y una de cada ocho chicas niegan la violencia de género.

Por otro lado, Redondo aseguró que ya no existe «un único patrón de hombre» y consideró importante que haya referentes de identidades masculinas «más libres, igualitarias y corresponsables», en las que otros puedan mirarse, sobre todo los jóvenes varones.

Mientras Redondo celebraba su nuevo triunfo, algunas de las pulseras antimaltrato estaban fallando. De hecho, lejos de que lo que asegura el Ministerio, un informe del 2019 ya alertó de los problemas. Asimismo, el documento que presentó en primicia El Debate, denuncia que a pesar de existir tecnología 4G en España desde el año 2013 «no se tradujo en una mejora y renovación inmediata de las Pulseras Telemáticas», ya que continuaban funcionando con tecnología 2G.

Debido a esto, mientras el departamento Ana Redondo se gastaba más de un millón de euros en campañas que lo que hacen es humillar a los hombres, las mujeres carecían de protección, ya que el funcionamiento del sistema Cometa de pulseras de control telemático de agresores machistas dejó de funcionar.

Lejos de intentar solucionarlo, el Gobierno, al igual que la titular de la cartera de Igualdad, defendieron que las incidencias «se abordaron y se resolvieron en 2024». Sin embargo, después de varias investigaciones y presiones, Carmen Martínez Perza, delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, ha terminado pidiendo «disculpas» a las víctimas por la inquietud generada por las pulseras.

Una semana después de que saliese a la luz todo el problema con esos sistemas de protección, la Asociación Española de Feministas Socialistas (Femes) ha exigido la renuncia de la ministra Redondo, al considerar que es la responsable directa de «la falta de explicación y de claridad» en torno a las recientes incidencias con las pulseras telemáticas de control a agresores de violencia machista. Además, la acusan de no haber ofrecido «ninguna explicación convincente» sobre los fallos detectados en el sistema de seguimiento telemático de maltratadores.