Pajitas de papel
¿Más ecológicas, pero menos seguras? Detectan tóxicos en las pajitas de papel que sustituyeron a las de plástico
Los resultados revelan que un 69 % de las pajitas contenían al menos una de las 18 variedades de sustancias químicas sintéticas persistentes
Fue en el año 2021 cuando pajitas, platos o bastoncillos de plástico se prohibieron en la Unión Europea, empujando a que el cartón tomase el relevo de este material altamente contaminante. Lo cierto es que, años después, la medida parece haber funcionado y la ciudadanía se ha adaptado. Las copas se ingieren con pajitas de cartón, la base de los bastoncillos ya no es de plástico y nadie parece haberse percatado y los platos de usar y tirar o los vasos del café han pasado a estar hechos de cartón. Pero, ¿y si este cambio conllevase algún peligro para la salud?
Un reciente estudio realizado en Bélgica ha puesto en entredicho la seguridad de las pajitas de papel y bambú. La investigación, publicada en la revista Food Additives and Contaminants, ha detectado la presencia de sustancias químicas sintéticas persistentes conocidas como PFAS (sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas) en una gran parte de las pajitas analizadas.
El estudio, pionero en Europa y el segundo de su tipo a nivel mundial, analizó 39 marcas de pajitas disponibles en el mercado belga, fabricadas con distintos materiales como papel, bambú, plástico, vidrio y acero inoxidable. Los resultados revelan que un 69 % de las pajitas contenían al menos una de las 18 variedades de PFAS detectadas. Especialmente preocupante fue la presencia de estos compuestos en el 90 % de las pajitas de papel y el 80 % de las de bambú.
Estas sustancias, utilizadas habitualmente para conferir resistencia al agua, al calor y a las manchas en productos como ropa técnica, utensilios de cocina o envases, son conocidas por su durabilidad extrema y su dificultad para degradarse. Por ello, se las denomina «sustancias químicas eternas». A largo plazo, su acumulación puede generar impactos sobre la salud humana, incluyendo daños hepáticos, alteraciones hormonales, disminución de la eficacia de vacunas, y en algunos casos, cáncer.
El doctor Thimo Groffen, investigador de la Universidad de Amberes y uno de los autores del estudio, subraya que el hallazgo pone en duda la supuesta sostenibilidad de las pajitas vegetales: «Aunque se presentan como una opción ecológica frente al plástico, muchas de estas pajitas contienen PFAS, lo que cuestiona su impacto positivo sobre la salud y el medio ambiente».
Uno de los compuestos más detectados fue el PFOA (ácido perfluorooctanoico), prohibido internacionalmente desde 2020. También se identificaron ácidos fluorados de cadena corta, como el TFA y el TFMS, que por su alta solubilidad podrían pasar fácilmente de la pajita a la bebida.
Aunque las concentraciones encontradas son bajas y su uso ocasional no supone un riesgo inmediato, los investigadores advierten sobre su capacidad para acumularse en el organismo con el tiempo. Además, no está claro si los PFAS fueron añadidos deliberadamente durante la fabricación o si proceden de contaminación ambiental.
En contraste, las pajitas de acero inoxidable fueron las únicas en las que no se detectaron rastros de estas sustancias. Por ello, los expertos recomiendan su uso como una alternativa más segura y verdaderamente reutilizable.
Trump ya ordenó volver al plástico
En febrero de este año, recién nombrado presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, decidió poner fin a las pajitas de papel mediante una orden ejecutiva, favoreciendo así la vuelta de las de plástico. «Firmaré una orden ejecutiva la próxima semana para poner fin al ridículo impulso de Biden por las pajitas de papel, que no funcionan. ¡De vuelta al plástico!», afirmó Trump en un mensaje en su red social, Truth Social.
Este decreto tiene un efecto limitado a las operaciones del Gobierno federal, pues muchos estados como California o Nueva York tienen en efecto prohibiciones de este tipo de utensilios de plástico de un solo uso que afectan al sector privado. Que Estados Unidos haya revertido esta ley muestra el enfrentamiento existente sobre el uso de pajitas de papel en sustitución de las de plástico: unas perjudican al medio ambiente y las otras podrían hacerlo a la salud humana.