¿Por qué hace tanto frío en el espacio?
La temperatura media es de -266 ºC, lo que se debe a varios factores
Al contrario de lo que alguien pudiera pensar, el universo es, en su mayor parte, un lugar absolutamente gélido. Si a 12.000 metros, que es la altitud a la que vuelan los aviones, la temperatura media ronda los -50 ºC, en el caso del espacio exterior ésta es de -266 ºC.
Hay varios factores que lo provocan. En primer lugar, la ausencia de un medio de conducción térmica. Al no haber una atmósfera que pueda conducir el calor a través de procesos de convección, la temperatura está determinada por la radiación térmica, el principal mecanismo de transferencia de calor en el espacio.
Esta radiación consiste en la emisión de energía en forma de radiación electromagnética y, a diferencia de otros métodos, como la conducción o la convección, que requieren de un medio material para propagarlo, puede ocurrir en el vacío cósmico.
La radiación electromagnética surge a partir de la energía almacenada en los propios átomos. En ese sentido, las estrellas son fuentes de radiación a través de sus procesos nucleares que, en su trayectoria, impactan contra determinados cuerpos y partículas. Esos elementos son, sin embargo, un pequeño porcentaje, puesto que la mayor parte del universo está vacío. Además, la falta de una atmósfera que retenga el calor contribuye a la dispersión de la radiación y, en consecuencia, a las temperaturas bajas.
Al mismo tiempo, la temperatura del fondo cósmico de microondas (CMB), un fenómeno conocido como radiación de fondo y vinculado al eco del Big Bang, es otro factor crucial. La temperatura de esta radiación es de -270,45 ºC y se dirige en todas direcciones.
La radiación de fondo cósmico se originó durante los primeros momentos del universo, unos 380.000 años después del Big Bang, cuando el universo era similar a una sopa densa de múltiples partículas cargadas que emitían radiación en forma de fotones, según describe National Geographic. A medida que el Universo se expandió y enfrió, esa radiación se fue liberando, creando el CMB.
Desde entonces, los fotones que la componen han viajado a través del espacio, llegando finalmente hasta nosotros. Esa radiación interactúa con los objetos cósmicos e influye en sus temperaturas, lo que contribuye a la complexión térmica del universo.