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26 de abril de 2024

Santi Millán y Jesús Calleja, en un pueblo etíope

Santi Millán y Jesús Calleja, en un pueblo etíope

'Planeta Calleja'

El duro golpe que el covid dio a Santi Millán

El actor y presentador rememora con Calleja los últimos días con su padre, al que el virus mató al inicio de la primera ola

En el segundo país más poblado de África se citaron el pasado febrero –aunque se emitió anoche– Jesús Calleja y Santi Millán, actor y presentador de Got Talent.
Era su segunda vez en Planeta Calleja. El catalán ya había estado en el programa del aventurero leonés cuando la crisis de los 40. En aquella ocasión escaló una montaña alpina, el Cervino. Han pasado ocho años y ya está en la de los 50 (nació en 1968): el destino fue Etiopía.
Primero se fueron a ver la tribu de los Mursis, que «viven igual que hace cientos de años», apuntó Calleja, que nunca había tenido ocasión de visitarlos porque el acceso hacia su área de residencia (son «semi nómadas») se ha acondicionado recientemente. Son fuertes, y violentos si alguien (alguna tribu rival) les quiere quitar sus vacas. Y tienen la misma costumbre estética que aquel indígena con el que se paseaba Sting, la de ponerse un plato en el labio.
Santi Millán habla con un miembro de la tribu de los Mursis

Santi Millán habla con un miembro de la tribu de los Mursis

Después visitaron a los Konso, que cuentan con las mujeres más fuertes de África, que portan kilos de madera y tienen una media de diez hijos.
Más tarde, acudieron al cráter de un volcán en el que se ha formado un lago negro del que se extraen tres tipos de sal. Calleja mostró su admiración por los hombres que allí trabajan y que se exponen a todo tipo de penalidades (perder la vista o la audición) debido a la acidez del agua.

Su evolución televisiva

Hubo tiempo, claro, para hablar de la carrera del actor y presentador.
A los 18 años trabajó en un matadero de noche, actividad que compatibilizaba con los estudios diurnos de Arte Dramático. «La función de un padre tiene que ser hacer independientes a sus hijos cuanto antes. ¿Qué hace la Naturaleza? Te amamanto y tal, pero hay que espabilar». Veinte años con su pareja, a la que conoció cuando ella era cámara y él ejercía de reportero.
Estuvo diez años en La Cubana. «Corbacho y yo lo dejamos el mismo día», apuntó. Horas después de aquel adiós lo llamó Andreu Buenafuente, que lo incorporó a La cosa nostra. En ese programa triunfó con un personaje de un reportero, llamado Paco Monteaguado. No tuvo tiempo de hacerlo en Periodistas, porque solo participó en seis capítulos, pues cancelaron la serie al poco de llegar él. De seis a siete: Siete vidas le dio gran popularidad. «Me lo pasaba muy bien», recordó.
Esa faceta de actor la sigue cultivando con El pueblo, la serie de la que está rodando la tercera temporada «en un pueblo abandonado de la España profunda», en la provincia de Soria.

Su amigo independentista

Sus hijos y los de Raül Romeva van al mismo colegio. Además, las dos familias veranean en Menorca. Son amigos. Por eso lo fue a ver a la cárcel: «Ver a alguien cercano a ti en prisión es impactante, porque parece que no te va a tocar nunca». Le impactó la actitud del político de ERC: «Lo que más me impresionó fue la fortaleza mental».
«Comparto muchas cosas con Raül Romeva, pero no las ideas políticas. Yo no soy independentista», quiso aclarar. Piensa que «en el caso del procés hubo muchas cosas que se hicieron mal, y una de ellas fue no escucharse».

La muerte de su padre

Calleja le preguntó si se había agobiado durante el confinamiento. Ignoraba lo que había sufrido. «A mí me costaba ser consciente de lo que pasaba realmente. Y de repente pensar: ‘Hostia, es que se ha parado el mundo’». Reconoció tener miedo. «Yo creo que el bicho existe, y yo lo he sufrido en primera persona».
Calleja: ¿En primera persona?
Millán: Mi padre murió de covid. Mi padre enferma en la primera ola, en los primeros días. Es ese momento en que no sabes absolutamente nada de qué está pasando.
El fallecimiento del padre del actor se publicó en su día, pero por la cara de sorpresa que puso Calleja se deduce que éste lo ignoraba.
Santi Millán y Jesús Calleja, subidos a un árbol, en Etiopía

Santi Millán y Jesús Calleja, subidos a un árbol, en Etiopía

Millán contó esos últimos momentos. «Yo puedo entrar con mi padre en el hospital, y puedo quedarme con mi padre en el hospital porque mi padre era dependiente». «Tenía alzhéimer pero aún me reconocía», si bien le puso en el móvil la que era su canción favorita (Mirando al mar, de Jorge Sepúlveda) y le pidió que la quitase. Se le había borrado de la cabeza.
«Yo estoy una semana con él en la habitación noche y día. No había ni geles hidroalcohólicos ni mascarillas ni nada. Y murió allí», se extendió. «Es una situación dura por las circunstancias. Por naturaleza sabes que si todo va bien tú verás morir a tu padre, eso es ley de vida. Pero las circunstancias fueron duras. Porque mi madre no lo pudo ver… Mis hermanos, tampoco. Y yo tuve la suerte de que pude estar con él hasta el último día», continuó detallando.
Calleja: ¿Lloraste?
Santi Millán: Sí, claro, Mucho. Mucho, mucho.
«Ser consciente de que te vas a morir hace que aproveches cada minuto de la vida», zanjó el actor. 
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