Fundado en 1910

25 de abril de 2024

Vino y queso

Vino y queso

¿De dónde proviene la expresión «que no te la den con queso»?

La actual buena avenencia entre el vino y el queso sirvió en otros tiempos como trampa para hacer pasar un buen caldo por simple morapio

«que no te la den con queso» es una frase hecha que se utiliza cuando queremos advertir a alguien de que tenga cuidado para que no le engañen. Dice la leyenda que los antiguos bodegueros, quienes recibían la visita de los compradores, cuando sabían que alguna añada no había salido tan buena como otras, ofrecían el caldo a los catadores acompañado de queso, que disimulaba la peor calidad del vino.
El sabor y olor intenso del queso enmascaraba las características del vino, y así el taimado bodeguero conseguía venderlo al mismo precio que otro superior. La pillería que ha trascendido en el lenguaje como sugerencia general ante la estafa, haya o no haya vino y queso de por medio. De hecho, tanto ha trascendido, también la elaboración del vino y del queso, que hoy se consideran productos con buen maridaje, alcanzándose una armonía entre ambos gracias a la correcta elección.

Pese al dicho, el vino mejor con queso

Así, por ejemplo, se recomiendan los quesos suaves junto con los vinos jóvenes o los blancos, del mismo modo que a los quesos más fuertes deben de acompañarles vinos tintos de crianza.
Incluso un estudio del Institute of Food Technologies en 2016 demostró que el vino sabe mejor si se consume con queso por reducir la astringencia y la acidez del vino, «potenciando la duración de los aromas de frutos rojos». Aunque por mucho que hayan cambiado los tiempos, si hay amenaza de engaño, siempre habrá alguien que ponga sobre aviso con (y para) «que no te la den con queso».
Comentarios
tracking