El Castillo de Montizón, en Villamanrique, Ciudad Real (Castilla-La Mancha), ha sido uno de los beneficiarios del programa de rehabilitación y promoción turística del patrimonio histórico español de la Fundación Casas Históricas y Singulares de España
La Fundación Casas Históricas y Singulares de España ofrece un millón de euros para el patrimonio histórico español
El jurado falla el reparto de los fondos para rehabilitar 18 casas históricas y singulares del país, entre los que hay antiguos molinos, masías, haciendas o castillos
El Programa de ayudas para la recuperación del patrimonio histórico español de titularidad privada y promoción turística fue convocado por la Fundación de Casas Históricas y Singulares de España, gracias a un donativo recibido de la empresa Airbnb lreland UC.
Desde la fundación creen conveniente «poner de manifiesto algunos puntos dignos de ser tenidos en consideración por las diferentes administraciones, por el conjunto de la trama empresarial, por los propietarios de bienes históricos y, especialmente, por la sociedad en general, depositaria final de la obligación de mantener el patrimonio histórico y receptora última de los diferentes beneficios que de esta conservación se derivan».
El fallo del jurado asegura que, en primer lugar, es necesario destacar la necesidad de apoyos relevantes «para mantener dicho patrimonio de titularidad privada construido a lo largo de los siglos», ya que no solo representa una parte importante de nuestra trayectoria, sino que es también una destacada fuente de riqueza en un futuro próximo. «Es imposible que dicha conservación pueda ser afrontada exclusivamente por los propietarios que, a través de generaciones y con importantes esfuerzos realizados en la actualidad, lo han mantenido y lo mantienen. Las actuales circunstancias hacen que sea necesario el concurso de los diversos elementos y actores políticos, económicos y sociales», asegura el documento compartido por la fundación.
Las características de este programa, sus limitaciones económicas y el destino que han de tener las obras realizadas a su cargo, así como las demás condiciones reseñadas en sus bases, han condicionado las decisiones del jurado que, a pesar de todo, quiere dejar constancia del valor e interés de la inmensa mayoría de las propuestas presentadas, que no han podido ser seleccionadas por no ajustarse exactamente a los fines específicos de esta convocatoria o por tener menor impacto en la conservación del patrimonio de titularidad privada.
Los 18 beneficiarios
- Pedro Echeandia Costa: Cal Mirosa, en Alforja, Tarragona (Cataluña).
- Justino Bernad Moreno: Hotel Rincón de Navarrete, en Navarrete del río, Teruel (Aragón).
- Monte de Corvinos S.L.: Castillo de Corvinos Albero Alto, en Huesca (Aragón).
- Palacio del Virrey Laserna S.L.: Palacio del Virrey Laserna, en Jerez de la Frontera, Cádiz (Andalucía).
- Francisco Javier Fernández Gómez: Local de la Antigua Fábrica de Quesos, en Solorzano, Cantabria (Cantabria).
- Son Rullan Inversiones, S.L.: Son Rullan Deyá, en Baleares (Islas Baleares).
- Mariano José Acuña Sepulveda: Hacienda Molino Nuevo, en Coripe, Sevilla (Andalucía).
- Carlos y Juan Jordán de Urries Gasset: Palacio de los Ulloa-Roda, Torre de Sande, en Cáceres (Extremadura).
- Enrique de Otazu Llana: Torre de Zabaleta, en Lesaca, Navarra (Comunidad Foral de Navarra).
- Joaquín Ignacio Mencos Doussinague: Palacio de los Mencos, en Tafalla, Navarra (Comunidad Foral de Navarra).
- Castillo de Montizón , S.L.: Castillo de Montizón, en Villamanrique, Ciudad Real (Castilla-La Mancha).
- Cristina Muñoz-Vargas Sainz de Vicuña: Calle progreso, 8, en Sevilla (Andalucía).
- María Teresa Peréz Vidal: Capilla del hospital de San Torcuato, abadía de Benevivere, en Villotilla Palencia (Castilla y León).
- Fundación Condado de Taboada: Pazo de Illobre, en Betanzos, La Coruña (Galicia).
- Joan Tarrida I Miquel: Castell de Llaes Ripollet, en Barcelona (Cataluña).
- José Luis Salgado Madriñán: Pazo del Laxe, en Monterroso, Lugo (Galicia).
- Pedro Borja Sangil López: Palacio Casa Sangil, en Borja, Zaragoza (Aragón).
- Pedro Montaner Alonso: Casa Palacio Can Vivot, en Palma, Baleares (Islas Baleares).
El fondo de rehabilitación
El pasado 20 de septiembre, la Fundación Casas Históricas y Singulares de España anunció el lanzamiento de un programa de Rehabilitación y Promoción Turística del Patrimonio Histórico Español que concederá ayudas de hasta 100.000 euros gracias a una donación de un millón de euros de la plataforma Airbnb. Este programa está destinado a financiar unos 20 proyectos de recuperación de viviendas ubicadas a lo largo de todo el territorio español, con fines de promoción del turismo.
El evento de presentación, celebrado en el Palacio de Liria, uno de los grandes símbolos del patrimonio histórico español, contó con la presencia de Javier Bahamonde, presidente de la Fundación Casas Históricas y Singulares de España, y Mónica Casañas, directora general de Airbnb Marketing Services SL.
El Pazo de Laxe, en Lugo, ha sido otro de los beneficiarios por el programa de la Fundación Casas Históricas y Singulares de España
“Estamos muy orgullosos de poder presentar este proyecto. Este fondo nos va a ayudar a poner en valor y preservar el patrimonio histórico español en su más amplia definición, ya que no hablamos sólo de iglesias y castillos. Con este enfoque en la preservación del patrimonio cultural, el objetivo es inspirar un aumento en el turismo patrimonial que no solamente beneficiará a las comunidades, sino también a los espacios patrimoniales que necesiten mantenimiento y visitantes, señaló Javier Bahamonde, presidente de la Fundación Casas Históricas y Singulares de España.
Además, Isaac Sastre, director general de Patrimonio Cultural y Bellas Artes, destacó que «las casas históricas y singulares son claves en el desarrollo sostenible como paradigma de la economía circular en cuanto que reutilizan o reciclan el uso del patrimonio, manteniendo su esencia y garantizando su conservación, pero sin desnaturalizarlo ni cosificarlo». «La proporcionalidad entre su valor y el coste ambiental de sus procesos de producción hacen de este tipo de patrimonio un conjunto ecoeficiente, que favorece la integración y participación social, que potencia las economías locales y la defensa del medio ambiente», añadió.
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