La cantante Patti Smith en un concierto
Patti Smith acaba en silla de ruedas tras desmayarse durante un concierto en Sao Paulo
Tras recuperarse de un inesperado desmayo en el escenario, la cantante quiso finalizar el concierto en Sao Paulo, aunque debió continuar el resto de su repertorio en silla de ruedas
La cantante y escritora Patti Smith, de 78 años, se desplomó el miércoles por la noche durante un concierto en el Teatro Cultura Artística São Paulo, que tuvo que abandonar en silla de ruedas, según ha publicado el periódico O Globo.
La cantante estaba acompañada en el escenario por Soundwalk Collective, un grupo de música experimental que en su perfil de Instagram ha señalado que la artista sufrió en los últimos días «una fuerte migraña y se sintió mareada en el escenario».
«Está siendo atendida por los mejores doctores y mañana (hoy jueves) volverá al escenario. Patti está tremendamente agradecida por vuestra paciencia y envía su amor a todos los que asistieron (al concierto)», han añadido.
Según publica el medio brasileño, tras desplomarse y volver al escenario, la cantante reapareció en silla de ruedas y cantó un par de temas más: Because the night y Alas.
La cantante de Chicago tiene esta noche una segunda actuación que, según Soundwalk Collective, sigue en pie.
«Gracias por vuestra bonita energía y vuestro apoyo. Ha sido una experiencia muy conmovedora para todos nosotros. Gracias por estar ahí», añade.
La cantante de Because the Night atribuyó la terrible experiencia a los efectos de una migraña y recurrió a sus redes sociales el jueves para criticar el revuelo que se había creado: «Extremadamente exagerado».
Smith publicó un selfie sonriente mientras saludaba a la cámara y escribió: «Esta soy [yo] haciéndoles saber a todos que estoy bien».
«Tuve algunos mareos después de la migraña. Tuve un pequeño accidente, abandoné el escenario y regresé 10 minutos después y hablé con el público, les dije que estaba bien y les canté Wing y Because the Night», aseveró.
La estrella de rock nominada al Grammy añadió que fue al médico y «estaba absolutamente bien», y agregó: «Por favor, no acepten ninguna otra historia».