Bill Russell, con la bandera estadounidense, en una imagen de 2011
Muere Bill Russell, leyenda de la NBA: ganó 11 anillos con los Boston Celtics
Su familia ha confirmado el fallecimiento de uno de los mejores jugadores de todos los tiempos
Bill Russell, once veces campeón de la NBA con los Boston Celtics, ha fallecido este domingo a los 88 años de edad, según ha informado su familia con un mensaje en la cuenta de Twitter del exjugador.
Leyenda del baloncesto estadounidense, Russell jugó toda su carrera en los Boston Celtics, de 1956 a 1969, y fue el gran protagonista de la 'Dinastía' que conquistó once anillos, ocho de ellos de forma consecutiva. Fue pieza clave y estandarte de ese equipo, desde el que fue considerado como uno de los mejores defensores de la historia de la NBA. Russell fue un destacado taponeador y un excelso defensor al hombre, claves para entender los éxitos de aquellos Celtics.
«Bill Russell, el más prolífico ganador de la historia del deporte americano, falleció este domingo en paz a los 88 años, con su mujer, Jeannine, a su lado», ha escrito la familia de esta leyenda de los Celtics, que fue nombrado además cinco veces MVP de la NBA.
Dos veces campeón de la NCAA y oro olímpico en Melbourne 1956, Russell también fue el primer entrenador afroamericano de la historia del deporte norteamericano. Dirigió a los Celtics en calidad de técnico-jugador de 1966 a 1969 y conquistó los títulos de 1968 y 1969.
Nombrado en la década de los 90 como uno de los 50 mejores jugadores de la historia de la NBA, Bill Russell ha formado parte del Basketball Hall of Fame desde 1975 y tiene un sinfín de galardones y distinciones. Para honrar su legado, la NBA dedicó a él el premio al MVP de las Finales, que fue ganado este año por Curry, de los Golden State Warriors.
Bill Russell, en 2011, recibiendo la Medalla de la Libertad por parte de Barack Obama
Además de su excepcional trayectoria en las pistas, Russell fue también un emblema deportivo de la lucha contra el racismo y por los derechos civiles en Estados Unidos.
«Más allá de los triunfos, su forma de entender las batallas es lo que iluminó su vida. (...) Bill denunció las injusticias con implacable claridad con la que pretendía romper el 'status quo', y con un ejemplo que, pese a que nunca fuera su humilde intención, siempre inspirará el trabajo en equipo, el altruismo y el cambio», añadió su familia.
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