El delantero del Real Madrid Vinicius Junior (d) celebra tras marcar el tercer gol
La intrahistoria del lío con Vinicius en Oviedo: pitos e insultos, le tiran una botella y el árbitro lo ignora
El Carlos Tartiere fue tierra hostil para el brasileño, que después dejó varios gestos poco deportivos
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Vaya por delante que esta no es una noticia para excusar los comportamientos de Vinicius Junior. Simplemente se trata de una pieza para contar qué llevó al brasileño a perder nuevamente los papeles y ganarse hasta la bronca de sus compañeros. Y es que da igual al campo que vaya el Real Madrid, que al final en todos los estadios la toman con el '7' del equipo merengue.
Vinicius llegó a Oviedo para jugar por primera vez en su carrera en el Carlos Tartiere y además se encontró con la sorpresa de que iba a ser suplente, algo a lo que no está acostumbrado. Empezó de risas en el banquillo con Militao, pero poco tardó en cambiarle el gesto, tan pronto como escuchó música de viento cuando su nombre fue anunciado por la megafonía. Se pitó a todos (salvo a Lunin), pero con el brasileño la intensidad fue mucho mayor.
Los decibelios subieron todavía más cuando Vinicius saltó al césped, en el minuto 63, y como le suele pasar se distrajo con lo que ocurría en la grada. Tardó en conectar con el partido y primero Ricardo de Burgos Bengoetxea le sacó una cartulina amarilla por simular un penalti. Se cebó con él el Carlos Tartiere y fue entonces cuando Vinicius entró de verdad al partido y en solo 10 minutos dio una asistencia e hizo un gol para terminar goleando al Oviedo.
No obstante, tras dar una asistencia a Mbappé en el minuto 83, una botella cayó desde la grada y terminó por encender al brasileño. Este fue rápidamente a mostrársela al árbitro, pero De Burgos Bengoetxea le ignoró y le dijo que se fuese ya para su campo. De ahí que Kylian le abrazara con fuerza y pusiera su mano en la boca para intentar que no se pudiese entender lo que decía y así no hubiese posibilidad de que acabara expulsado, pues ya tenía una amarilla.
La cosa fue a más cuando Vinicius hizo el tercer gol del partido, en el descuento, y mandó «a Segunda» a los aficionados del Oviedo. Un gesto que cabreó al máximo a la grada y que tampoco gustó nada a varios de sus compañeros. Ahora bien, no parece que el brasileño se arrepienta de ese desafortunado comportamiento porque al acabar el encuentro subió una publicación a sus redes sociales con un mensaje de lo más claro: «Yo soy así».
De esta manera el brasileño ha dejado claro que le gusta su forma de ser y además cuenta con el apoyo del vestuario pese a que hayan salido algunas informaciones hablando de «bronca» a Vinicius por lo ocurrido en el Carlos Tartiere. Estas se apoyan en un mensaje de Courtois por redes sociales hablando de que el Oviedo «es de Primera», pero que lo hace para poner en valor el triunfo de los blancos: «Gran victoria para seguir creciendo y mejorando como equipo en un campo muy difícil y que es de Primera».