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Vinicius, en el Real Madrid - Villarreal

Vinicius, en el Real Madrid - VillarrealEuropa Press

Vinicius se acerca a la renovación con el Real Madrid tras cuatro meses de sudor frío

Quiere hacer borrón y cuenta nueva. Resetear la situación. Comenzar de cero, sin olvidar lo sucedido, porque no se puede dejar de lado. Desea volver a jugar bien para ser el de antes, determinante, decisivo, estelar. Frente al Villareal vimos un comienzo de ese objetivo personal. Vinicius le pidió a Mbappé lanzar el penalti para sumar dos goles, rematar una buena faena y contentar a la afición con su rendimiento. El francés le dejó tirar la pena máxima, aunque a Xabi Alonso no le gustó que no se hiciera lo que ha decidido. El brasileño quiere dar un salto adelante y que todos lo vean. Volver a ser el de hace un año. Y renegociar su futuro en el Real Madrid sin acritud.

Ha sido una época mala. Una etapa agria. Después de siete años como titular indiscutible, Vini Jr. vio la cara B del disco del fútbol, la pérdida del cartel de titular. Una titularidad que se había ganado por méritos propios en el Real Madrid frente a unos rivales que le masacraron a patadas y le provocaron con insultos racistas y xenófobos ante la sospechosa pasividad de los árbitros. El delantero brasileño es quién más ha pagado en sus carnes el enfrentamiento del club blanco con el sistema arbitral.

Quizá sea cierto el mensaje analítico que se hace en el seno de la casa blanca: un entrenador no debe estar más de tres años en el Real Madrid. Las dos Champions conquistadas por Ancelotti permitieron continuar al italiano una cuarta campaña y en ella se observó el aburguesamiento de Vinicius y de otros futbolistas. Jugó mal y Carlo le mantuvo siempre en el once. No vivió la competencia de nadie, porque Rodrygo se hundió en un problema psicológico y lo suyo fue inclusive peor, pues perdió el puesto.

El Real Madrid fichó a Xabi Alonso para acabar con esa situación de enquistamiento. Había que cambiar. Reaccionar. Alonso ha venido a acabar con esa falta de nervio y a poner a todos firmes. Entre ellos a Vinicius, una figura que desapareció del mapa del fútbol tras quedar segundo en el anterior Balón de Oro.

La pérdida del nivel de Vinicius coincidió en el tiempo con el choque frontal con el club para firmar su continuidad por cinco años. No firmó. Y esa dualidad negativa, futbolística y económica, sumió al brasileño en una tendencia descendente. Ya no era importante en el equipo y el Real Madrid no le otorgaba el dinero que solicitaba, unos 25 millones netos por temporada, pues el jugador añadió una prima de fichaje por renovar. La entidad podía alcanzar los 22 millones netos con bonus. Pero no más.

El pulso perjudicó a Vinicius

El ambiente enrarecido generado por la divergencia económica afectó a las prestaciones del brasileño en el césped. Si ya no estaba jugando bien, la discrepancia del contrato agravó la situación. Comenzó a filtrar que podría quedarse hasta 2027 y marcharse gratis. Su agencia, Roc Nation Sports, estadounidense, centrada en profesionales del deporte norteamericano, demostró que no conoce lo que es el fútbol ni especialmente lo que es el Real Madrid.

Futbolista y apoderados provocaron tensiones innecesarias que perjudicaron a Vini en su juego y en su relación con la casa y con la afición. Había planteado un pulso al club y las opiniones de los seguidores estaban mayoritariamente en su contra. Se dio cuenta que el tiro salía por la culata. Y ha decidido revertir esa visión. No sabemos si el brasileño acabará renovando por cinco años. De momento le quedan dos. Pero busca otra relación con la casa.

Lo que los consejeros le han dejado claro, incluidos los consejeros del vestuario, es que para jugar bien debe concentrarse en el fútbol y apartarse mentalmente del litigio de la renovación. No se puede rendir ofuscado.

Tiene que dedicarse a jugar bien y nada más. El Real Madrid le hará la mejor propuesta posible si regresa al rendimiento diferencial. Pero nunca le ofrecerá una prima de fichaje, porque no viene de fuera ni llega gratis. Abriría un precedente. Cada cosa en su sitio. Vinicius tiene que volver a su sitio, a jugar como antes. Y luego hablaremos. Pero sin filtraciones amenazantes como las que obligaron al Real Madrid a decir que no le permitirá irse gratis en 2027 si no firma en los próximos meses.

En esa hipótesis, la continuidad del distanciamiento en la negociación, la entidad buscará un traspaso en el siguiente mercado invernal. Espera no tener que llegar a eso. Pero lo primero es jugar bien. Sin esta condición, la renovación no tiene sentido. Ya ha acercado posturas. Ahora tiene que acercarse a su nivel.

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