El constante maltrato del Barça a Ter Stegen: invisible en la plantilla y sin facilitarle una salida

'Més que un club' dice el lema del FC Barcelona, aunque esos valores de los que presumen en muchas ocasiones no los muestran. La última prueba de ello es el trato que está recibiendo Marc-André ter Stegen, una leyenda del club azulgrana y que, no olvidemos, es actualmente el primer capitán del equipo. Muchos quizás no lo recuerden, pero el guardameta alemán tiene ese alto honor al ser quien más lleva en la primera plantilla.

Ni ese hecho ni sus lesiones ni tampoco que el Mundial 2026 esté a la vuelta de la esquina ha tocado la fibra de los altos mandos del Barcelona. Tras su lesión a principios de la pasada campaña en el club decidieron que la etapa de Ter Stegen en Can Barça debía llegar a su fin y se pusieron manos a la obra. No importó que fuese el capital ni una leyenda, lo querían fuera y así se lo hicieron saber.

Trataron de echarlo en verano pero, la negativa inicial de Ter Stegen a marcharse –estaba en su derecho porque ya ayudó al club con una renovación larga para diferir salario– y la posterior lesión, hicieron imposible que el guardameta alemán encontrase una buena opción para jugar durante todo este año. Además, estaba dispuesto a pelear el puesto a Joan García, pero ni siquiera esa posibilidad le dieron, pues rápidamente anunciaron que Wojciech Szczesny sería el portero suplente.

Así pues, lesionado de una dolencia que permitió la inscripción de Joan García (a la que el germano se podría haber negado), al guardameta de Mönchengladbach solo le quedó el recuperarse de su lesión de larga duración que ya le ha provocado alrededor de cuatro meses fuera de los terrenos de juego. Todo apunta a que volverá pronto, pero el problema es que no tiene sitio y ni Hansi Flick ni el FC Barcelona están por la labor de hacérselo.

No facilitan su salida

Con contrato hasta 2028, es una evidencia que el salario de Ter Stegen es un problema para el Barça, pero ya no les corre prisa. Tienen a todos sus jugadores inscritos y en el mercado de invierno no van a incorporar a nadie, por lo que hasta el próximo verano no necesitan ese espacio en la masa salaria. Así pues, no les preocupa que el portero alemán no logre su objetivo de llegar rodado y en buenas condiciones al Mundial.

Mónaco, Manchester United o Besiktas son algunos de los nombres que han sonado en los últimos meses como posibles destinos para Ter Stegen, pero ahora ninguno de ellos está claro. Al principio se hablaba de que el Barça estaba dispuesto a conceder la carta libertad a su jugador, pero el portero, después de haber hecho ya numerosos favores al club, no está por la labor de perdonar lo que le deben. Por tanto, se entra en un callejón sin salida del que Ter Stegen puede salir muy perjudicado.

Lleve o no razón, tanto el club como el cuerpo técnico están contra él. Incluso la afición pide su marcha, por lo que saldrá del Barcelona por la puerta de atrás. Eso no parece tener ya solución, como tampoco su futuro a corto plazo en otro club. No tiene pinta de que se vaya a marchar en invierno y en Alemania hay serias dudas en torno a su figura. A sus 33 años tiene una oportunidad de oro para ser por fin el portero titular de la Mannschaft, pero Nagelsmann no tiene claro que vaya a rendir a buen nivel.

Ahora mismo, en la recta final de su recuperación, a Ter Stegen no le queda más remedio que trabajar en silencio y tratar por su cuenta de estar al 100 %. Solo una cascada de lesiones en la portería le darían hueco en el once, si eso no ocurre, lo más posible es que no entre ni en las convocatorias. Su carrera está en juego y a corto plazo la solución no parece sencilla.