Xabi Alonso, en Montilivi para el Girona - Real Madrid
La fecha límite de Xabi Alonso en el Real Madrid si sigue la crisis de resultados y los jugadores a mal nivel
En el club piensan que los futbolistas deben respetar profesionalmente al entrenador, ponerle en valor y demostrar su calidad en el campo
Las noticas positivas que saca el Real Madrid pese al pinchazo en Gerona
Hasta aquí hemos llegado. Basta ya de críticas. Basta ya de decir que el entrenador está verde, que Xabi Alonso se ha podido equivocar en alineaciones y en cambios, que pone excesivos vídeos como si fuera una serie de Netflix, que es demasiado táctico. Eso ya lo hemos escuchado demasiado y son perfiles de opinión que surgen de las bocas de los jugadores. Basta ya de filtraciones interesadas, porque esos mismos futbolistas están jugando en las posiciones que quieren y no están respondiendo. Ese preparador presuntamente bisoño les ha preguntado donde desean jugar, están jugando donde piden y no rinden.
Hasta ahora, hablar con fútbol en el campo han hablado muy poquitos. Mbappé, Courtois, Tchouaméni y Carreras han sido los mejores. Tras ellos, Fran García, Lunin, Rüdiger y Mendy han ofrecido buenas prestaciones en lo poco que han participado. Güler, Bellingham y Mastantuono sacan un aprobado raspado. Endrick y Gonzalo no entran en la ecuación porque no han jugado casi nada. Los demás han suspendido en el cómputo general de la temporada y eso hay que hacérselo mirar. La mitad de los futbolistas del plantel no han aprobado. Y los que aprobaron por décimas tampoco están para tirar cohetes. Que se miren el ombligo y dejen de mirar al jefe del banquillo.
El Real Madrid coge el toro por los cuernos. Alonso y su plantilla están condenados a entenderse y deben entenderse. La cúpula del club analiza que ya está bien de tanto parole y es la hora del calcio de verdad, del fútbol puro, en el campo, no en declaraciones sino en acciones. Algunos sueltan que el entrenador está verde y lo que los futbolistas tienen de hacer es jugar en el verde y no en el tapete inútil de la dialéctica.
La dirección deportiva reflexiona que si los jugadores están jugando donde le han pedido al entrenador, ya es cuestión de ellos. Ya no pueden decir que no les pone donde quieren. Ya no hay vídeos largos. Ya hay más conexión con el entrenador y no la frialdad que achacaban antes. Entonces, ya todo es cuestión de feeling. Los más viejos del lugar dicen que cuando un técnico cede tanto ante sus pupilos, le pierden el respeto. Pues el Real Madrid quiere que los futbolistas respeten profesionalmente a Xabier Alonso. Tiene razones para ello. Y hay argumentos para ello.
Alonso ganó la Bundesliga
En el club blanco se subraya que el vasco derrotó al Bayern de Múnich ganando todos los títulos con el Leverkusen. Que no es un novato. Claro que sí es un novato en dirigir a un gran transatlántico, siempre hay una primera vez y esta es la suya. Pero no se le puede minimizar por ello. No se pueden destacar los fallos como si fueran tragedias. Ancelotti y Zidane hacían muy pocos cambios, o los hacían muy tarde y también fallaban. Ahora se olvida lo malo y solo se ensalza lo bueno de los grandes entrenadores reconocidos. La gran diferencia con Alonso es que a Zizou y a Carletto se les respetaba. Y a Xabi no se le está respetando.
Se criticó al guipuzcoano por las cuatro suplencias iniciales de Vinicius. Se le acusó falsamente de dar entrada a Fran García como extremo ante el Elche, cuando era un «carrilero» largo en una defensa de tres con Carreras como central izquierdo. Vinicius venía de competir con Brasil y fue reservado para entrar en la segunda parte ya como un delantero nato. Eso lo han hecho Zidane y Carlo y no pasaba nada. Lo hace Alonso y parece que ha robado un banco.
Xabi Alonso, en Montilivi en el Girona - Real Madrid
En el aura, en el ambiente, se alimentan las ansias de echar a Xabi y no se sabe por qué. O sí se sabe: no se le respeta porque es nuevo. Se subraya ahora la entrada tardía de Gonzalo en Gerona, que coincidió también con la sustitución del mejor pasador, Trent. Son errores que no esconden que en el campo estaban los mejores jugadores del Real Madrid y no funcionaban. Solo Mbappé, Vinicius, Courtois, Militao y Rüdiger rindieron bien en Gerona. Y hemos mencionado al guardameta y a los dos centrales. En fase creativa solo destacaron los dos puntas y a veces no es suficiente. No fue suficiente en Vallecas, Elche y Gerona y eso indica que el resto del esquema ofensivo no rinde.
Sí, Xabi se equivocó al sacar a Gonzalo en el minuto 89 y al quitar a Trent, el que mejor centra. Vale. Dicho esto, es coherente recordar que esos fallos también los cometieron los entrenadores míticos del Real Madrid. Recordamos que en 2017, ganando la Liga taza a taza con el plan B, Zidane sacó a Ceballos en Leganés para disputar treinta segundos. El propio Zinedine fue preguntado por ello y dijo que estaba muy mal hecho. Sinceridad. Pero el francés produce, emana, respeto, un crédito ganado en títulos. Alonso no ha ganado títulos con el Real Madrid, porque es imposible, y no se le deja trabajar a gusto. No se admiten sus fallos, por pequeños que sean.
Lo más importante es que los futbolistas están jugando donde quieren y no ofrecen el nivel que se les presupone y que antes tenían. Esa es la pura realidad. Muchos de ellos lo saben y lo dicen en el fuero interno de la cocina de Valdebebas. «Hay que cambiar esta dinámica», ha escrito Mbappé. Mensaje para todos, para el grupo. Esa es la única certeza.
El límite es la Supercopa
Algunos quieren echar ya a Alonso. La dirección deportiva desea que el entrenador y los jugadores congenien, se conjunten y saquen esto adelante. El margen se extiende hasta la Supercopa de España, en enero. El Real Madrid se medirá al Atlético el 8 de enero en Arabia. Ese es el límite para que el técnico y la plantilla hayan encontrado soluciones. Por el camino tienen antes la visita de esta noche a San Mamés, el Celta, el City de Guardiola en el Bernabéu, el Alavés, el Sevilla y el Betis.
Claro, si en este periodo se produce una debacle, habrá que tomar medidas antes. Pero eso ocurriría con cualquier entrenador. Hay gente obsesionada con la caída del vasco, como si los futbolistas no tuvieran culpa de nada. Algunos pronostican que si el Real Madrid pierde esta noche con claridad en Bilbao puede caer el técnico. Nadie lo sabe. El margen de mejora son estos cuarenta días. El Atlético en enero pondrá el listón. El Real Madrid quiere que los futbolistas ayuden a Xabi Alonso porque están jugando dónde ellos quieren. ¿Qué más quieren?