Kepa, en su presentación con el Real Madrid
La reválida madridista de Kepa, el portero al que desechó Zidane y ahora debe convencer a Ancelotti
El guardameta español llega al Real Madrid cinco años después de que Zizou frenara su fichaje y apostara por seguir con Keylor Navas
Ancelotti confirma la titularidad de Lunin en Almería y protesta por lo cargado que está el calendario
Kepa Arrizabalaga al fin ha cumplido su sueño de jugar en el Real Madrid. El portero vasco estuvo muy cerca de firmar por el club blanco en 2018, pero no terminaba de convencer a Zinedine Zidane, que decidió echar marcha atrás el fichaje –que ya estaba cerrado– y seguir apostando por Keylor Navas, su guardameta preferido durante su primera etapa como entrenador del equipo madridista.
Este frenazo a la incorporación de Kepa terminó con el portero yéndose al Chelsea previo pago de 80 millones de euros al Athletic Club. Es decir, se convirtió en el portero más caro de la historia y sigue siéndolo por el momento. Sin embargo, salvo en ocasiones puntuales no ha terminado nunca de demostrar su precio en el club londinense, que ha visto con buenos ojos su marcha en calidad de cedido al Real Madrid.
La rotura de ligamento que sufrió Thibaut Courtois durante la pretemporada ha dado una oportunidad inesperada a Kepa Arrizabalaga, quien estaba en negociaciones para marcharse al Bayern de Múnich, pero que lo frenó todo al ver que podía terminar jugando en el Real Madrid. Un deseo que se le truncó en el 2018 y que ahora se ha convertido al fin en una realidad.
Kepa ya es portero del Real Madrid y cuenta con muchas opciones de ocupar una portería en la que Zidane no le veía. El francés insistió en numerosas ocasiones a la dirección deportiva de que no necesitaba un portero y que con Keylor Navas había un guardameta de garantías. De hecho, el Madrid solo firmó a Courtois una vez que Zidane anunció su dimisión en junio de 2018.
Ancelotti tendrá que decidir
Después de que el técnico francés dejara claro una y otra vez que Kepa no iba a ser su portero, será Ancelotti quien tenga que decidir si será el suyo. La realidad es que es un guardameta que gusta mucho en la zona noble del Santiago Bernabéu, pero que a lo largo de su carrera ha dejado algunas dudas, especialmente en el Chelsea, club donde ha pasado largos periodos de tiempo en el banquillo.
Por eso, ha aterrizado en Madrid sin tener la titularidad asegurada y consciente de que tendrá muy difícil seguir en el club blanco la próxima temporada. Si Courtois se recupera bien no debería haber debate, aunque Kepa confía en que lo haya, pues ya ha asegurado su deseo de quedarse más allá de este año. «Ojalá con mi esfuerzo y rendimiento pueda hacer que eso pasé», aseguró en su presentación.
Kepa Arrizabalaga posa junto al presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, durante su presentación
No obstante, para eso todavía queda tiempo y Kepa deberá demostrar que puede ser el titular en el Real Madrid, algo que no es nada fácil. De hecho, su primer partido como madridista –este sábado en Almería– lo verá desde el banquillo, pues de momento la titularidad va a seguir siendo para Lunin tal y como confirmó Ancelotti en la rueda de prensa previa al encuentro.
El italiano no se va a olvidar de Lunin, quien cumplió con creces en el primer partido de la temporada y que sabe lo que es vivir a la sombra de Courtois los dos últimos años. El ucraniano quiere aprovechar su oportunidad y por el momento no ha dado motivos para no ser quien finalmente sustituya al belga, pues además el sí es propiedad del Real Madrid y está convencido de que puede ganarle el puesto a Kepa.
Kepa tendrá que trabajar duro
Así las cosas, la situación de Kepa en el Madrid es algo confusa. En principio llega para ser el titular después de una temporada en el que fue de los mejores del Chelsea , pero no sorprendería que tampoco termine de convencer al italiano. Lo cierto es que el de Ondárroa gusta y disgusta a partes iguales y habrá que estar atento a la postura de Ancelotti.
Por otro lado, el fichaje de Kepa por el Madrid le podría ayudar a hacerse con la titularidad de la selección española, un puesto que ahora mismo es propiedad de Unai Simón. Eso sí, el nuevo guardameta blanco ya ha recuperado su puesto en las convocatorias y el Real Madrid es el mejor escaparate para hacerse un fijo en la portería de España.
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