
Carlos Alcaraz celebra Roland Garros con Juan Carlos Ferrero y el resto de su equipo
Rumbo a Ibiza para desconectar y estar de fiesta: el plan de Alcaraz antes de atacar Wimbledon
El campeón de cinco Grand Slams se tomará unos días para descansar con sus amigos y volverá a Murcia a finales de esta semana
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Ganar Roland Garros de la manera que lo ha hecho Carlos Alcaraz tiene recompensas más allá de alzar al cielo de París la Copa de los Mosqueteros, los 2.000 puntos ATP que otorga ser el campeón y los más de dos millones de euros que se embolsará. Tras dos semanas de lo más exigentes, ahora al murciano le llega la hora de desconectar antes de atacar sus próximo reto: la gira de hierba.
Después de que saliera el pasado mes de abril el documental de Carlos Alcaraz: A mi manera todos los que decidieron verlo descubrieron algo que era un secreto a voces: Carlos Alcaraz es aficionado a salir de fiesta y es una de sus maneras de desconectar cuando tiene unos días libres. Mostrar esto públicamente le hizo ganarse varias críticas, pues además la producción de Netflix salió justo el día antes de que decidiera bajarse del Mutua Madrid Open.
Sus fiestas en Ibiza o su «hoy se cena en vaso» que le dijo a su hermano Álvaro tras ganar Roland Garros 2024 provocaron que varias voces autorizadas del mundo del tenis saliesen a decir que con esa actitud no iba a ganar mucho más. Ya daba igual que Alcaraz saliese de fiesta mucho menos de lo que se creía porque el relato lo tenía perdido: era un fiestero sin pasión por el tenis.
Ni dos meses ha tardado el murciano en demostrar que se equivocaban, que él hace las cosas a su manera y que sus escapadas no son tanto para beber alcohol y salir de fiesta sino para desconectar la mente. La última vez que lo hizo fue tras perder en segunda ronda del Masters 1000 de Miami en el mes de marzo. «Toqué fondo», reconoció unas semanas después. Por eso, tras verse superado, optó por marcharse con su familia a la Riviera Maya. «Tiempo de calidad», dijo tras esos días.
Todo victorias y rumbo a Ibiza
Esas vacaciones fueron la mejor medicina para Alcaraz, que empezó a tope la gira de tierra batida. Ganó en Montecarlo, llegó a la final del Conde de Godó, se tuvo que saltar Madrid por una pequeña lesión, ganó en Roma y se alzó con la gloria en París tras ganar por segundo año consecutivo Roland Garros. En total, 22 victorias y solo una derrota le han valido para demostrado dos cosas. La primera, que en tierra batida no hay nadie capaz de hacerle sombra si está a su nivel y la segunda, que él se conoce perfectamente y sabe que marcharse a desconectar y pegarse alguna fiesta le sirve para después llegar con aires renovados.
Por eso, Alcaraz vuelve a utilizar esta receta y ahora ha optado por marcharse a Ibiza hasta finales de esta semana. Lo ha hecho con varios amigos y estará descansando y también celebrando su triunfo hasta finales de esta semana, cuando regrese a Murcia para decidir si juega Queens o va directamente a Wimbledon. La idea, tal y como ha desvelado su entrenador, Juan Carlos Ferrero, es jugar, aunque de momento habrá que esperar al fin de semana para comprobar que esté todo bien.

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De hecho, su entrenador reconoció abiertamente que ahora el murciano se ha ido unos días y que él le apoya. «Le dije que lo pasara bien, que lo merecía, pero que se acordara que es tenista en todo momento. Ya sabemos cómo es... le va bien y cuando vuelve, vuelve bien de cabeza, renovado. Ya no es la palabra fiesta, es por la desconexión de estar con sus amigos, de no pensar en tenis y de ser una criatura de 22 años», comentó en El Larguero de la Cadena SER.
También en dicho programa desveló las opciones que tiene Alcaraz de jugar Queen's, un torneo que ganó en 2023, pero en el que perdió en su debut el curso pasado. «El plan es jugarlo, pero en unos días tomaremos una decisión definitiva. A mitad de torneo lo hablamos y Carlos nos dijo que tenía ganas de ir. Después de estos días de descanso haremos un test para ver cómo se encuentra física y anímicamente. Retomaremos los entrenamiento específicos para la hierba para afinar temas de movilidad. Iremos a Wimbledon con muchas ganas, le encanta a Carlos jugar allí», concluyó.
Así pues, la presencia del murciano en la antesala a Wimbledon no está garantizada, pero sí el hecho de que vaya a ir al All England Lawn Tennis Club con el deseo de revalidar la corona conquistada en 2023 y 2024. No será fácil, pues habrá mucha competencia, pero el hambre del murciano en esta gira de hierba no va a caer.