André Agassi regresa al tenis para ayudar al jugador llamado a ganar a Sinner y Alcaraz

El tenis masculino tiene ahora mismo únicamente dos nombres propios: Jannik Sinner y Carlos Alcaraz. Son ellos los que en los últimos años se han repartido todos los Grand Slams y aunque Novak Djokovic, a sus 38 años, sigue plantando cara –ha ganado los dos últimos partidos a Alcaraz–, la realidad es que nadie más parece contar con armas para aspirar a ganar un major. Ni siquiera Holger Rune, que en teoría estaba llamado a completar el nuevo Big 3.

El jugador danés en su infancia ganó varias veces a Alcaraz y en sus primeros años en el circuito parecía estar al mismo nivel que el murciano. De hecho, en Paris-Bercy 2022 Rune derrotó a Carlitos en cuartos y terminó llevándose el título en una final fascinante ante Novak Djokovic. Acabó el danés de maravilla el año y daba la sensación de que estaba llamado a la gloria.

Tres años después, la realidad es que a Rune le ha podido la presión y se está diluyendo. Tiene alguna semana de buen tenis, como la del Conde de Godó esta temporada, y está en el top 10, pero muy lejos del nivel de Sinner y Alcaraz. No es ni por asomo candidato en los Grand Slams y el tiempo pasa sin que demuestre su potencial. De ahí que haya contratado a André Agassi para intentar relanzar su carrera.

Y es que el extenista norteamericano, que ya ha trabajado con Novak Djokovic o Grigor Dimitrov, se ha unido al equipo de Rune. Se trata de un fichaje estrella del danés, que sigue teniendo como objetivo llegar al número 1, tal y como confesó en Tennis.com: «Contacté con él hace unos meses. He podido comprobar que es una persona muy inteligente y tiene una manera única y genuina de interpretar el juego. Pienso que es un momento ideal para empezar a trabajar con él porque estoy encontrándome bien con mi tenis, he vuelto a mi base»

No se ve lejos de Alcaraz y Sinner

Rune, consciente de que hasta ahora no está cumpliendo con las expectativas, sigue mostrándose ambicioso y cree que las cosas podrían cambiar pronto. «Soy 8 del mundo y quiero hacer todo lo posible para seguir ascendiendo en el ranking», confesó para después desvelar los retos que se marca: «Hay jugadores que pueden ser top-20 o, incluso top-10 sin demasiado esfuerzo, tienden a conformarse con eso. Pero mi objetivo siempre ha sido llegar a ser número 1 del mundo y creo que puedo conseguirlo. Para ello, debo hacer algunas cosas diferentes a lo que vengo haciendo y, por eso, Agassi puede ayudarme».