
Los préstamos han endurecido sus condiciones
Dinero
El TIN y el TAE, todo lo que debes saber para pedir un préstamo y evitar el sablazo
No solo los bancos se lanzan a prestar dinero, pero las condiciones no deben ser abusivas
Los españoles llevan más de un año utilizando sus ahorros para poder vivir. La inflación sigue disparada, el precio del aceite ha subido más de un 50 % y los sueldos no se pueden estirar tanto.
Los bancos se ofrecen a hacer préstamos personales a sus clientes, pero a esto se unen grandes centros comerciales que también quieren poner líneas de crédito a sus clientes con unas condiciones que distan mucho de las de hace un par de años.
Inflación
El tipo de interés marca si el préstamo es sostenible o no en el tiempo por quien lo pide. El interés del BCE es que el dinero permanezca en los bancos de ahí su política de encarecer el precio que presta a los bancos nacionales para que estos, a su vez, lo vuelvan a prestar aún más alto.
Hay centros comerciales que han hecho llegar a sus clientes un mail con un préstamo ya concedido de hasta 15.000 euros con 60 meses de plazo de devolución. Sorprende ver cómo la cifra del importe total adeudado, el coste total del crédito y los intereses se han disparado.
Ejemplo de un crédito concedido por la financiera de El Corte Inglés
El motivo es el TIN del 15 % y el TAE de 19,85 % que provocan que, si se piden 2.000 euros para afrontar gastos del inicio del curso y estirarlo hasta Navidad, el cliente se planta con una deuda de 3.328,57 euros, un coste total de 328 euros, intereses por valor de 268,57 euros y una comisión de apertura de 60 euros. Todo esto lo pagará en 12 meses, pero si lo dilata a 24, pagará 146, 34 euros al mes y tendrá una deuda total de 3.571,90 euros, 571,90 de coste total y unos intereses de 511,90 euros con otros 60 euros de comisión de apertura.
TIN y TAE
El TIN y el TAE son dos términos relacionados con las tasas de interés que se utilizan en el ámbito financiero y bancario.
El TIN (Tipo de Interés Nominal) es la tasa de interés básica que se aplica a un producto financiero, como un préstamo, una cuenta de ahorros o un depósito a plazo fijo. Representa el costo o el rendimiento financiero antes de tener en cuenta otros factores, como comisiones o gastos asociados. Es decir, el TIN es el porcentaje que se utiliza para calcular los intereses generados o los intereses a pagar sin tener en cuenta ninguna otra variable.
El TAE (Tasa Anual Equivalente) es una medida más completa del costo o rendimiento de un producto financiero, ya que tiene en cuenta no solo el TIN sino también otros factores, como comisiones, gastos, plazos y frecuencia de los pagos de intereses. El TAE se expresa como un porcentaje anual y permite a los consumidores comparar diferentes productos financieros de manera más precisa ya que refleja el costo total o el rendimiento real de un producto.
En resumen, el TIN es la tasa de interés básica, mientras que el TAE es una medida más completa que incluye todos los costos y factores relacionados con un producto financiero. Al comparar productos financieros, es importante prestar atención tanto al TIN como al TAE, ya que el TAE proporciona una imagen más completa de lo que realmente costará o rendirá una inversión o un préstamo.