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27 de julio de 2024

Fachada del Tribunal Supremo, a 7 de julio de 2023, en Madrid

Fachada del Tribunal SupremoEuropa Press

Condenada una nieta que trató de estafar 85.000 euros falsificando la firma de su abuelo

El Supremo confirma la pena, de casi dos años y medio de cárcel, a una joven que llegó a cobrar 5.500 euros

Más de 85.000 euros. Es la cantidad que una nieta intentó estafar falsificando la firma de su abuelo. De ellos llegó a embolsarse 5.500 euros, según una sentencia del Tribunal Supremo difundida este miércoles por Europa Press.

El Alto Tribunal ha confirmado la condena a casi dos años y medio de cárcel para una nieta que falsificó la firma de su abuelo. El objetivo: poder cobrar cheques de un talonario al que tuvo acceso dado que ambos residían en el mismo domicilio.

Los hechos probados datan de 2015 cuando la acusada, «con ánimo de obtener un enriquecimiento injusto», rellenó y firmo hasta tres cheques del talonario del anciano y, «simulando la firma», llegó a cobrar la mencionada cuantía de 5.500 euros.

Más elaborada fue el segundo intento. Para dar cobertura a otro cheque, en este caso de 80.000 euros, la nieta confeccionó y firmó un contrato de donación privado por el que el abuelo le transfería dicha cantidad, pretendiendo así justificar el cobro en el procedimiento abierto posteriormente por vía judicial para la división de la herencia.

En primera instancia la Audiencia de Madrid la condenó por un delito continuado de falsedad en documento mercantil en concurso medial con un delito continuado de estafa a un año y 11 meses de prisión, y por un delito de falsedad en documento privado con un delito de estafa procesal en grado de tentativa a otros seis meses de prisión.

La condenada recurrió en casación al Supremo tras no lograr que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid le diera la razón, y en su escrito señaló que se había vulnerado su derecho a la presunción de inocencia y a la tutela judicial efectiva. Añadía además que cuestionaba también la regularidad de uno de los medios de prueba aportados por la acusación, un informe pericial grafológico, que posteriormente el Supremo ha desestimado.

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