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Empleo
¿Te pueden despedir por ir a la playa estando de baja? Un abogado lo aclara
«Imagínate la situación: estás tomando el sol, te incorporas un poco y te encuentras a tu jefe. ¿Te podría despedir?», argumenta Juanma Lorente
A veces, la vida laboral presenta situaciones curiosas que pueden generar incertidumbre y estrés. Una de ellas es qué puede suceder si un trabajador está de baja médica y es avistado en la playa disfrutando del sol. Este dilema es abordado de manera ejemplar por Juanma Lorente, quien en un reciente video de TikTok explicó las implicaciones de ser visto en un entorno recreativo durante un período de incapacidad.
La primera reacción de muchos ante la posibilidad de ser vistos en la playa durante una baja médica es la preocupación por las consecuencias laborales. La incertidumbre se intensifica si, por casualidad, el jefe se encuentra en la misma ubicación.
Según Juanma Lorente, existe la posibilidad de que un jefe, al reconocer a un empleado en esa situación, decida tomar acción inmediata, incluso despidiéndolo en el acto. Sin embargo, esta decisión no es tan sencilla.
La clave radica, como apunta el abogado, en la razón detrás de la baja. «Si el motivo de la incapacidad es psicológico, lo más probable es que el médico recomiende actividades que ayuden a aliviar la tensión y el estrés», lo que podría incluir un día de relajación en la playa.
Situaciones específicas a considerar
Además de las bajas por motivos psicológicos, Juanma destaca la importancia del contexto en otras situaciones. Por ejemplo, «si un trabajador tiene el brazo escayolado, esto no implica que no pueda salir de casa». La regla general es que no está prohibido disfrutar de un día soleado en la playa, siempre y cuando no realice actividades que contradigan las recomendaciones médicas.
Por lo tanto, es esencial que los empleados comprendan que la forma en que puedan ser percibidos durante su baja dependerá del tipo de lesión o afección que padecen.
La revelación de Juanma Lorente sobre este tema invita a los trabajadores a reflexionar sobre sus derechos durante una baja médica. De este modo, la playa no solo se convierte en un refugio para aliviar el estrés, sino también en un símbolo de recuperación y del legítimo derecho a disfrutar de la vida más allá del trabajo.
