Varias personas son atendidas en la Agencia Tributaria
Andalucía amplía su ventaja y ya tiene 110.000 cotizantes más de IRPF que Cataluña, aunque recauda la mitad
Madrid, por su parte, se mantiene en tercera posición, con 3.897.784 contribuyentes, el 16,25 % del total nacional
Andalucía consolida su sorpasso. La región sumó en 2023 más contribuyentes de IRPF que Cataluña por tercer año consecutivo, según datos de la Agencia Tributaria recién publicados. Un adelantamiento que no se produjo hasta 2021, a pesar de que Andalucía ha tenido históricamente mayor población.
Según la Agencia Tributaria, Andalucía cerró 2023 con 4.302.050 pagadores de IRPF, el 17,3 % del total, siendo la comunidad con más contribuyentes. Fueron 112.214 más que Cataluña, una brecha que no ha hecho sino incrementarse en los últimos tres años con datos disponibles. Ese año, la población de Andalucía era de 8.631.862 habitantes, y la de Cataluña, 8.113.490.
La comunidad ha optado, desde la llegada a la presidencia de Juan Manuel Moreno en 2019, por una política de rebajas fiscales, incluyendo una rebaja de las tarifas de IRPF, una deflactación de los primeros tramos y la creación de nuevas deducciones. Fruto de ello, el crecimiento de los declarantes en 2023 alcanzó el 22 %, cuando entre 2013 y 2018 la media se situó en un 10 %.
Madrid, por su parte, se mantiene en tercera posición, con 3.897.784 contribuyentes, el 16,25 % del total nacional. Sigue en relevancia la Comunidad Valenciana, con 2.718.994, el 11,34 %, en una estadística de la que no hay datos de País Vasco y Navarra por tener un régimen foral propio.
Pese a este vuelco, los ingresos tributarios por IRPF en Andalucía siguen muy por debajo de los de Cataluña, según las cifras contenidas en el Informe Anual de Recaudación Tributaría. Así, en 2023 la recaudación en Andalucía en concepto de IRPF ascendió a 12.201 millones de euros, la mitad de los 25.438 millones de Cataluña.
Ambas autonomías, no obstante, se ven arrolladas por la Comunidad de Madrid, donde en 2023 se recaudaron 49.533 millones de euros en concepto de IRPF.
Cifras, en cualquier caso, que deben ser tomadas con cautela, como recalcan desde Hacienda. «Dado que la asignación de los contribuyentes por Delegaciones se hace de acuerdo a su domicilio fiscal, los ingresos tributarios de una Delegación no son necesariamente un buen indicador de la importancia fiscal del territorio ni de la actividad económica en el mismo. Tampoco la variación anual de los ingresos tributarios gestionados por una Delegación es una señal adecuada del dinamismo fiscal o recaudatorio del territorio», afirma el fisco. Estos datos, además, se pueden ver impactados por cambios de domicilio fiscal durante el ejercicio.