El ministro de Universidades, Joan Subirats
Subirats pide que la universidad no sea solo ir a escuchar al «Fray Luis de León de turno»
Polémico paralelismo del ministro de Universidades a la hora de pedir «reforzar la vida universitaria» tras la pandemia
El ministro de Universidades, Joan Subirats, ha abogado por reforzar la vida en los campus, que no se limite a escuchar al «Fray Luis de León de turno», en referencia al célebre profesor de la Universidad de Salamanca.
"Es importante reforzar todo aquello que es la vida del campus y la experiencia fuera de las aulas, añadir valor al factor presencial. Por tanto, que no sea una especie de ir a la universidad a oír al Fray Luis de León de turno a explicar lo de 'como decíamos ayer', ha añadido el ministro, que ha reconocido que estaba caricaturizando la situación.
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Reforzar la vida universitaria
Tras visitar y reunirse con los responsables de 48 universidades en los últimos meses, Subirats ha relatado que se le transmitió una «bajada de la vida» debido a la pandemia, de ahí la importancia de «reforzar la vida» universitaria y la experiencia fuera de la aulas; se trata sobre todo de «añadir valor al factor de la presencialidad» y que se convierta en una experiencia «única», distinta a la «online».
Ello exige, ha dicho en la clausura de la mesa redonda «¿Qué opina la sociedad española sobre nuestras universidades?», organizada por la Fundación CYD (Conocimiento y Desarrollo), más innovación docente, experimentación y que los universitarios puedan gestionar los servicios de la Universidad -como ocurre en EEUU y prevé la última ley universitaria (LOSU)-, creando empresas o cooperativas en lugar de las concesiones que existen hoy.
Sobre cómo se puede mejorar la empleabilidad de los egresados, el ministro ha apuntado a fortalecer las llamadas competencias blandas «que las empresas valoran porque vete tú a saber como será el empleo del futuro»; incorporar en la universidad la idea de la formación a lo largo de toda la vida o facilitar a los exalumnos formaciones después de dejar el campus.
Con la LOSU y el Plan de Micreocredenciales presentado hace unas semanas, la idea es que las universidades «no piensen solo en estudiantes de 18 a 29 años» sino en personas de más edad o que no pudieron en su momento acceder a una educación superior.
«Hemos dicho a la universidad que esto es un 'sand box', una caja de experimentación, que experimenten con los recursos que reciban y piensen en términos de demanda y no de oferta, que piensen en lo que se necesita en su entorno, refuercen la conexión con la CEOE, las cámaras de comercio, las ong... y si esto funciona bien vamos a poder pedir más dinero» a la Unión Europea", ha subrayado.