El Rey emérito, Don Juan Carlos I
Tribunales
Anticorrupción espera los últimos «documentos bancarios» de Suiza para archivar la investigación de Juan Carlos I
La Fiscalía mantiene abierta la investigación sobre Don Juan Carlos pendiente de los últimos flecos de la comisión rogatoria helvética. El número dos de Dolores Delgado maneja los tiempos que podrían verse prorrogados hasta el próximo verano
La investigación abierta por la Fiscalía sobre los presuntos negocios de Juan Carlos I toca a retirada. Las pesquisas están abocadas al archivo pero los tiempos los maneja el teniente fiscal del Tribunal Supremo y número dos de Dolores Delgado, Juan Ignacio Campos, quien por esta razón, según apuntan a El Debate fuentes próximas a la investigación, choca en ocasiones con el fiscal jefe Anticorrupción, Alejandro Luzón, partidario de cerrar capítulo cuanto antes. Mientras tanto las mismas fuentes confirman que «sigue todo abierto» ya que «queda información bancaria por recibir» de Suiza, en el marco de la comisión rogatoria librada a las autoridades helvéticas. Un escenario que podría hacer necesario prorrogar la investigación hasta el próximo verano.
Una vez resueltos los flecos sobre el Rey emérito, la Fiscalía del Supremo y la Anticorrupción, ambas dependientes de la exministra de Justicia, decretarán el archivo al alimón de los tres frentes de la investigación que, hasta la fecha, mantiene vivos el Ministerio Público contra Don Juan Carlos. No habrá querella ni solicitud de acciones judiciales adicionales contra el monarca tras «dar por buenas las regularizaciones tributarias efectuadas» de manera voluntaria según han confirmado a El Debate fuentes conocedoras de la causa.
El propio teniente fiscal del Supremo Juan Ignacio Campos de quien, en último término, pende la decisión sobre el final del periplo de Juan Carlos I, fue el que comunicó oficialmente al Rey emérito la apertura de hasta tres líneas de investigación contra él, en junio, noviembre y diciembre de 2020, respectivamente. La Fiscalía del Alto Tribunal notificó entonces al rey emérito que estaba siendo investigado por su fortuna, buena parte de ella oculta en el extranjero, lo que provocó que el monarca se dirigiese voluntariamente a la Agencia Tributaria para consignar dos pagos en concepto de regularización y disipar, así, las dudas sobre el presunto delito fiscal que planeaba sobre él.
En la primera de las ocasiones, Hacienda registró un ingreso por importe de 678.393 euros. Más tarde, en febrero de 2021 consignó una segunda entrega de 4,4 millones de euros. Hasta la fecha, sendas actuaciones tributarias acometidas por la nada desdeñable suma de 5,3 millones de euros han cerrado la puerta, en términos penales, a un presunto delito. Además, y pese a las actuaciones dirigidas a rastrear el dinero supuestamente donado al Rey emérito por amigos para sus gastos no han podido revelarse ocultos en fondos depositados en paraísos fiscales.
La Fiscalía se inclina, también, por dar por cerrada la investigación en base a la inviolabilidad que protegía a Don Juan Carlos durante su reinado, una condición que le eximiría de cualquier responsabilidad en las supuestas comisiones que pudo cobrar de Arabia Saudí por las obras del AVE a La Meca.
Fin del exilio voluntario
Don Juan Carlos emprendió rumbo a Abu Dabi el 3 de agosto del pasado año, después de que la Casa Real, con el visto bueno del Gobierno, acordara que lo mejor era su salida temporal de España a la espera del resultado de las diligencias fiscales. Desde entonces no ha regresado a España en ningún momento pese a que en los últimos tiempos –y tras conocerse que la Fiscalía archivará, más pronto que tarde, las actuaciones iniciadas contra él– ha manifestado a su entorno más íntimo y cercano su voluntad de regresar a nuestro país.
El padre del Rey Felipe VI ha evitado concretar si sería una vuelta temporal o definitiva de su exilio voluntario pero considera que podrá «volver» una vez no sigan abiertas las investigaciones que hay sobre él. Ya lo intentó tiempo atrás, aunque sus pretensiones no fructificaron al poder comprometer el reinado de su hijo.
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