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04 de mayo de 2024

La rebaja incluye mascarillas, gel desinfectante y el resto de productos de protección personal y como límite el 31 de diciembre de 2021

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Caso Mascarillas 2

El Ayuntamiento de Madrid fue estafado en otra partida de mascarillas defectuosas por un consultor neoyorquino

La Policía Judicial ha remitido un informe al juez de Instrucción número 30 de Madrid en el que identifica al presunto autor tras la entrega del lote

Una estafa valorada en más de un millón de euros a la que, ahora, la Policía Judicial ha puesto nombre. El titular del Juzgado de Instrucción número 30 de Madrid baraja la reapertura de una investigación iniciada el pasado mes de julio -y archivada provisionalmente por falta de pruebas- tras la identificación del posible autor de un delito de engaño al Ayuntamiento de Madrid en la venta de un lote de mascarillas defectuosas. La causa coincide en el tiempo con la instrucción paralela de las pesquisas sobre Luis Medina y Alberto Luceño, por unos hechos similares.
La supuesta estafa de 1,2 millones de euros estaba siendo objeto de rastreo por parte de la Policía Municipal de Madrid que, finalmente, ha conseguido dar con el proveedor estadounidense que suministró una partida defectuosa de medio millón de mascarillas al Consistorio de la capital. Se trataría del propietario de la consultora Sinclair & Wilde, intermediario quien, en un principio se pensó que vivía en Nueva York al tener la empresa una dirección postal ubicada en dicha ciudad norteamericana, pero que ahora ha sido localizado en Madrid.
Aunque se trata de dos operaciones diferentes, el sumario judicial de la causa que sigue el juez Alberto Carretero contra los empresarios Medina y Luceño incluía un informe de la Policía Municipal relativo a esta segunda estafa en el que se alertaba de que la documentación facilitada no se correspondía con las certificaciones preceptivas que exige ni la Unión Europea (UE) ni de España, en este tipo de suministros de material sanitario, «incluyendo documentos que se indican para otros productos como pueden ser los cosméticos».
En un primer momento, el juez decretó la apertura de unas diligencias de investigación pero el pasado 19 de julio procedió al sobreseimiento de la denuncia ante la imposibilidad de dar con un autor conocido quien, hasta hoy, se encontraba en paradero desconocido.

Aprobado por la funeraria municipal

El pasado 12 de abril, la Policía Judicial remitió un oficio al magistrado encargado del caso en el que se informaba de la identificación del posible autor de la estafa. Un nuevo hecho que, según apuntan fuentes judiciales a El Debate, podría motivar que el instructor reabra el procedimiento.
El Consejo de Administración de la funeraria municipal -entidad a través de la que se canalizaron todas las compras de material sanitario en la primera ola de pandemia, como ya sucedió en los tres contratos bajo sospecha de Medina y Luceño- aprobó la adquisición de medio millón de unidades de mascarillas FFP2, el 24 de marzo de 2020.
La delegada de Seguridad y Emergencias de Madrid, Inmaculada Sanz, ha detallado cómo tras varias incidencias iniciales, las mascarillas llegaron «algunas semanas más tarde» y, una vez en el almacén del Plan Territorial de Emergencia Municipal del Ayuntamiento de Madrid (PEMAM) se confirmaron las sospechas de que el material entregado no cumplía con las exigencias requeridas.
Fue entonces cuando la Policía Municipal inició una investigación, previa solicitud del director del PEMAN, para comprobar los hechos y el 5 de marzo de 2021 presentó ante la Justicia madrileña los resultados del atestado realizado por la Unidad de Coordinación Judicial del cuerpo.
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