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29 de abril de 2024

Jaime Ignacio del Burgo (PP), José María Aznar (PP) y Jesús Aizpún (UPN) en la firma del acuerdo por el que el PP se integraba en UPN. Era el año 1991

Jaime Ignacio del Burgo (PP), José María Aznar (PP) y Jesús Aizpún (UPN) en la firma del acuerdo por el que el PP se integraba en UPN. Era el año 1991EFE

UPN-PP: 40 años de un matrimonio irreconciliable

Conforme se acercan las elecciones, la tensión entre las dos formaciones que durante más de 20 años concurrieron juntas ha escalado posiciones

«Es la consumación de la traición a UPN por parte de los dos (Sergio Sayas y Carlos García Adanero) y del PP», respondía el presidente de Unión del Pueblo Navarro al pacto aprobado este martes por el que los dos diputados regionalistas suspendidos de militancia el pasado mes de marzo concurrirían en las listas del Partido Popular en las próximas elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo.
Y esa frase de Javier Esparza fue la consumación de la ruptura de un matrimonio que ha permanecido unido buena parte del periodo democrático. De hecho, el noviazgo comenzó en 1982, a los tres años de la fundación de UPN cuando concurrió con la Alianza Popular de Manuel Fraga a las elecciones generales. El noviazgo se mantuvo durante nueve años en los que acudieron conjuntamente a las distintas convocatorias electorales hasta que ya en 1991 y de la mano de José María Aznar el Partido Popular desaparece en Navarra y sus militantes y dirigentes se integran en UPN. A cambio, los diputados y senadores de UPN pasan en el grupo parlamentario popular.
El matrimonio duró 17 años, hasta que en 2008 el Partido Popular anunció la ruptura del pacto porque UPN quería abstenerse en los Presupuestos socialistas de aquel año y el Partido Popular optaba por el voto en contra. Aquella ruptura fue muy similar a la que se produjo el pasado mes de marzo con la votación de la reforma laboral. En aquel 2008, uno diputado de UPN se abstuvo, como pedía su partido y otro rompió la disciplina de voto e hizo lo que pedía el PP. Así que Santiago Cervera fue expulsado del partido. A los pocos meses, fue nombrado presidente del Partido Popular de Navarra.
Mariano Rajoy (PP) y Miguel Sanz (UPN) mantuvieron varias reuniones en 2008 para tratar de evitar la ruptura del acuerdo de 1991. No lo consiguieron

Mariano Rajoy (PP) y Miguel Sanz (UPN) mantuvieron varias reuniones en 2008 para tratar de evitar la ruptura del acuerdo de 1991. No lo consiguieronEFE

Ni contigo ni sin ti

Pese a la ruptura, continuaron los escarceos por los que se presentaban de forma conjunta a las elecciones generales y por separado a las elecciones forales y municipales. De hecho, tan separados iban a las elecciones forales que en 2011 UPN gobernó en coalición con el PSOE. Pero esa relación de conveniencia apenas duró 11 meses.
Y en las elecciones de 2015, a las que acudieron todos por separado, se produjo el gran giro. Por primera vez en la historia de la democracia de Navarra, el nacionalismo vasco gobernó en la Comunidad foral. Así que para las de 2019 UPN y PP decidieron reeditar su amor, metiendo en la conjunción a Ciudadanos, para formar Navarra Suma.
Javier Esparza (UPN) y Pablo Casado (PP) firmaron en 2019 la concurrencia conjunta a las elecciones generales que, junto a Ciudadanos, formarían Navarra Suma

Javier Esparza (UPN) y Pablo Casado (PP) firmaron en 2019 la concurrencia conjunta a las elecciones generales que, junto a Ciudadanos, formarían Navarra SumaPablo Ojer

El divorcio

Tras el verano, el amor se volvió a romper y esta vez parece que de forma definitiva. En agosto el vicesecretario de Organización del PP, Miguel Tellado, aseguró en una entrevista que en las elecciones de 2023 el PP concurriría con sus siglas en Navarra. «Unir el centro derecha en Navarra es hacerlo alrededor de las siglas del Partido Popular», defendió a pesar de que el PP en Navarra en sus mejores resultados, los de 2011, obtuvo 23.500 votos por 111.500 de UPN.
Estas afirmaciones no sentaron nada bien en UPN y su presidente, Javier Esparza, anunciaba el pasado 12 de diciembre que concurrirían en solitario a las elecciones forales y municipales del 28 de mayo. «Las encuestas nos dicen que esta vez sumamos más apoyos yendo por separado que yendo juntos y nos dicen que ir separados es lo que más opciones nos da para conseguir nuestro objetivo, que es volver a liderar Navarra y que EH Bildu no mande en esta tierra, que no decida».
¿En qué se basa UPN para hacer esta afirmación? El propio Jesús Aizpún, fundador de UPN, en la presentación de la formación regionalista allá por 1979: «Por muchos esfuerzos que se hagan, la óptica de Madrid no es la misma que de Navarra. Nosotros queremos que los problemas se resuelvan con la óptica de Navarra».
Y esta visión se mantiene en 2023. «Desde Madrid no se conoce Navarra, queda muy lejos. Desde ahí nunca se van a solucionar los problemas de esta tierra. Los partidos nacionales tienen otras prioridades», afirmaba Javier Esparza el pasado miércoles y 43 años después de una frase de Aizpún prácticamente idéntica.
La idea extendida entre los regionalistas en Navarra es que ahora que crece el descontento en el partido socialista, tanto a nivel nacional como a nivel navarro, el socialista navarro nunca va a votar al Partido Popular ni a cualquier formación que lo incluya.
Por eso Javier Esparza optó por concurrir a las próximas elecciones forales y municipales en solitario y por eso Javier Esparza en ningún momento ha rechazado de plano pactar después de los comicios del 28-M con el Partido Popular. Aunque, por el momento, en el PP no se muestran muy propensos a darse una tercera oportunidad.
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