Un juzgado de Badajoz ofrece a la juez del hermano de Sánchez denunciar a la fontanera del PSOE por espiarla para cerrar la causa

El Juzgado de Instrucción número 4 de Badajoz ha ofrecido a la magistrada Beatriz Biedma, instructora del procedimiento penal contra David Sánchez, hermano del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la posibilidad de denunciar a la militante socialista Leire Díez por un presunto delito de descubrimiento y revelación de secretos. De esta manera, el juzgado busca que la juez manifieste si desea ejercer acciones penales contra Díez, conocida como la fontanera del PSOE, por haber recopilado supuestamente información personal sobre ella para tratar de frenar la causa en curso.

Los hechos se remontan a una denuncia presentada por el sindicato Manos Limpias, que ha aportado audios y artículos periodísticos, entre ellos un reportaje de investigación de este periódico, que señalan una confabulación entre Díez, el exmagistrado Luis José Sáenz de Tejada y el empresario Javier Pérez Dolset. Según el sindicato, el objetivo de estos tres denunciados habría sido desacreditar a la juez instructora para neutralizar la investigación abierta contra David Sánchez y otros responsables políticos por presunta prevaricación, nombramiento ilegal y tráfico de influencias.

La causa que originó este terremoto judicial está siendo tramitada en el Juzgado de Instrucción número 3 de Badajoz, del que es titular la magistrada Beatriz Biedma. En ese procedimiento se investiga a David Sánchez y a Miguel Ángel Gallardo, expresidente de la Diputación de Badajoz, entre otros, por la fabricación a medida de un puesto público para el hermano del jefe del Ejecutivo. La instrucción ha sido especialmente delicada y ha contado con la participación del sindicato Manos Limpias como acusación popular.

Según consta en el auto fechado el 8 de julio al que ha tenido acceso El Debate, el juzgado considera que los hechos denunciados por Manos Limpias podrían constituir delitos de descubrimiento y revelación de secretos y tráfico de influencias. Para que el primero de estos delitos pueda ser perseguido, la ley exige la denuncia expresa de la persona agraviada, en este caso la propia juez Biedma. Por este motivo, la magistrada instructora del nuevo procedimiento, Marta Hernández, ha citado a la juez Biedma para que manifieste si desea o no formular denuncia contra Leire Díez. La diligencia está fijada para el 17 de julio a las 9:30 de la mañana.

Además del ofrecimiento de acciones a la juez, el auto recoge la necesidad de que Manos Limpias presente querella formal y deposite una fianza de 8.000 euros para poder ejercer la acusación popular en este nuevo procedimiento. El juzgado también ha ordenado recabar el testimonio de otro procedimiento en curso en el Juzgado de Instrucción número 2 de Badajoz, que afecta igualmente a Leire Díez y Sáenz de Tejada, con el fin de determinar si existe conexidad entre ambos casos. El detonante de la investigación han sido informaciones periodísticas y audios aportados por el sindicato en los que se apunta a que Díez envió enviado a dos militantes del PSOE a Badajoz con el objetivo de recopilar información personal comprometedora sobre la juez instructora. La finalidad última, según la denuncia, era reventar la causa que afecta al entorno más cercano del presidente del Gobierno.

Entre las maniobras descritas también figura la presentación de una denuncia ante la Fiscalía General del Estado por parte de Sáenz de Tejada contra la juez Biedma. Esta denuncia, que el sindicato vincula a un intento de presión concertado con Leire Díez y Pérez Dolset, habría tenido efecto en la marcha de la causa, ya que la fiscal encargada del procedimiento contra David Sánchez cambió posteriormente de criterio y solicitó el archivo. El caso se convierte así en una ramificación más del proceso judicial contra el hermano de Sánchez. Ahora, la instrucción abierta en el juzgado número 4 de Badajoz apunta a una operación de sabotaje a la independencia judicial con implicaciones que podrían extenderse más allá de los investigados iniciales.

La figura de Leire Díez, militante socialista conocida en el entorno como la fontanera del PSOE, cobra especial protagonismo por su supuesto papel como operadora política encargada de neutralizar procedimientos judiciales sensibles para el partido. Si finalmente la juez Biedma decide ejercer acciones penales contra ella, el escenario judicial podría agravarse notablemente para el círculo de confianza del presidente del Gobierno.