El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares
Albares anuncia un acuerdo con Israel para que 21 de los españoles de la flotilla regresen este domingo
Sin embargo, no lo confirmará «totalmente» hasta que «no los vea sentados en el avión y despegando»
Según el ministro de Exteriores, el grupo total constaría de 49 personas, tal y como ha cotejado la cartera con la lista que han facilitado las autoridades de Israel
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, anunciaba este domingo «haber llegado a un acuerdo con Israel» para que un primer grupo de los españoles retenidos regrese, «si nada se tuerce».
«Desde el Ministerio de Asuntos Exteriores hemos organizado todo para que hoy mismo puedan volar desde Tel Aviv», comentaba Albares en declaraciones al Canal 24 horas. Se trata de 21 de los 49 ciudadanos españoles —según ha cotejado la cartera con la lista que han facilitado las autoridades del país hebreo— que viajaban en la Flotilla Global Sumud y se encuentran confinados en la prisión de Saharonim (en el sur de Israel).
Pese al acuerdo, del que ha preferido no dar detalles hasta que la totalidad regrese a suelo español, Albares mantenía la cautela, reiterando que sucederá «si no se malogra nada». «Tenemos los datos de hora de salida y de llegada. Hasta que no los vea sentados en el avión y despegando, no lo confirmaremos totalmente», advertía.
Han reconocido su «entrada ilegal»
De la misma forma, comentaba que este primer grupo de españoles ha sido quienes han «aceptado firmar el documento» por el que reconocían haber entrado ilegalmente en el país. Así lo refleja la «legislación interna de Israel» —comentaba el titular de Exteriores—, acelerando el proceso. «En cualquier caso, esta situación de retención tiene que terminar inmediatamente y sus derechos tienen que estar garantizados», afirmaba.
Albares recordaba que el cónsul tiene «instrucciones directas» de visitar cada día «hasta que el último de ellos esté en libertad» a todos los españoles de la prisión de Saharonim y comprobar de primera mano si están recibiendo los alimentos y atención médica necesarios. Igualmente, habrían señalado «claramente» a las autoridades israelíes quiénes son los «parlamentarios y periodistas», quienes poseen «unas garantías e inmunidades superiores». «Esto no quiere decir que no prestemos la misma atención al resto», apostillaba, exigiendo su liberación como ya ha sucedido «con otros países».
Sin embargo, pese a que las autoridades israelíes lo aseguran, no ha podido comprobar aún que se estén atendiendo todas sus necesidades «hasta que el cónsul salga del centro», ya que se le retira el móvil a su entrada.
Dos Estados «por justicia y dignidad»
El ministro de Exteriores mostraba su apoyo a toda mediación «de Qatar, Egipto, Turquía o el plan de paz norteamericano». «Apostamos por la paz», proseguía, a la vez que reclamaba que Israel acabara con sus operaciones «independientemente del resultado de esas negociaciones».
«Tiene que terminar ya este bloqueo inhumano que está produciendo una hambruna inducida», exigía, pidiendo a Hamás que libere «a todos los rehenes incondicionalmente hoy mismo».
Aunque la paz ya sería «enorme» si se produce solo en esos términos, Albares reclamaba que sirviera para que fuera «definitiva, duradera y para poner en pie un Estado palestino realista y viable» que pudiera coexistir con el país hebreo por «justicia y dignidad». Aludía finalmente a las manifestaciones propalestinas repartidas por la geografía española, las cuales responden al «sentir del Gobierno y al sentir mayoritario del pueblo español».