La fiscal provincial de Madrid agendó una nota sobre Begoña Gómez los días de la filtración contra el novio de Ayuso

¿Qué hacía la fiscal provincial de Madrid, Pilar Rodríguez refiriéndose a Begoña Gómez en los días en los que su departamento emitió la nota de prensa sobre el novio de Isabel Díaz Ayuso, reflejando datos confidenciales del empresario? Esta es la pregunta que se hacen los miembros de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil tras encontrarse, durante sus investigaciones, una anotación en la agenda de de Rodríguez en la que consta el siguiente texto: «Restaurante Manuel Becerra. Begoña Gómez Fernández».

Lo llamativo del pie de página incorporado en el dietario de la fiscal que accedió a firmar y divulgar el comunicado que provocó la querella del empresario Alberto González Amador y la denuncia penal del Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid (ICM) contra el fiscal general del Estado, es que se corresponde, precisamente, con los días en los que se cocinó la filtración contra la pareja de la presidenta de Madrid, en los días 13 y 14 de marzo de 2024.

Cabe recordar que el contenido del post-it pegado en la hoja destacada por los agentes judiciales durante la entrada y registro en el despacho de la fiscal provincial ya fue objeto de polémica en la causa penal que se sigue contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, acusado de un delito de revelación de secretos y que se sentará en el banquillo en las dos primeras semanas de noviembre para responder por ello.

De hecho, el pasado 10 de enero, el abogado de González Amador pedía al juez instructor del caso en el Tribunal Supremo, Ángel Hurtado, que investigase la anotación en la que aparece el nombre de Begoña Gómez y que consta en la agenda de Pilar Rodríguez para quien, finalmente, se decretó el archivo de las investigaciones.

Preguntada por este extremo durante el interrogatorio como imputada, la fiscal adujo entonces que se trataba de dos notas distintas en la que la primera se hacía alusión al incendio de un establecimiento en Madrid y la segunda era para pedir cuentas del procedimiento que afecta a la esposa de Pedro Sánchez, bajo la lupa de la Justicia por hasta cinco presuntos delitos diferentes: malversación, corrupción en los negocios, tráfico de influencias, apropiación indebida y falsedad documental.

Sin embargo, las fechas no coincidirían con esta versión ya que la anotación localizada por la UCO es de marzo de 2024 y no sería hasta abril de ese año, un mes después, cuando el juez Juan Carlos Peinado, titular del Instrucción número 41 de Madrid, dictase el auto de incoación de diligencias previas contra Gómez que continúan, a día de hoy.

Pero sí serían las mismas fechas en las que en la Fiscalía se desató la operación de Estado contra Díaz Ayuso, presuntamente orquestada desde La Moncloa, a raíz de una investigación tributaria abierta contra su novio que acabaría en manos del Ministerio Público y que en las horas posteriores al posible encuentro entre Gómez y Rodríguez, desencadenó una suerte de filtraciones de datos confidenciales contenidos en la misma, entre varios medios de comunicación y el denominado 'equipo de Fortuny'.

La sucesión cronológica del caso arrancaba a las 21:29 horas del día 13 de marzo, cuando El Mundo publicó una información sobre la oferta de un acuerdo propuesto por la Fiscalía al novio de Díaz Ayuso para llegar a un acuerdo y archivar su causa. Tan sólo 45 minutos más tarde, a las 22:10, de ese mismo día, fue una televisión la que se descolgó con una noticia en sentido contrario, aclarando que había sido la defensa de González Amador, en manos del fiscalista Carlos Neira, la que había manifestado su voluntad de alcanzar un pacto de conformidad reconociendo, a cambio, dos delitos contra la Hacienda Pública y de falsedad documental.

La noticia sobre las pesquisas penales había saltado tan sólo un día antes, el 12 de marzo de 2024, y sería el 13 cuando varios medios de comunicación publicaron una información, presuntamente confirmada por el jefe de Gabinete de Díaz Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez, previa autorización del interesado, en la que se apuntaba que la Fiscalía había ofrecido un pacto de conformidad a González Amador, un hecho que se apresuró a desmentir el propio Ministerio Fiscal con una nota informativa el día 14 de marzo.

Durante las 24 horas en las que se desencadenaron los hechos y se divulgó el comunicado, el intercambio de mensajes en el seno de la Institución y en la cúpula de la misma que encabeza García Ortiz fue frenético. Una dinámica en la que, a estas alturas, resulta difícil de entender que la fiscal provincial de Madrid, hoy des imputada, hiciese anotaciones en su agenda sobre la mujer del presidente del Gobierno que, por aquel entonces, no estaba investigada.