Óscar Fernández: «Que Gallardo, imputado por gravísimos delitos, sea el candidato del PSOE es un insulto a todos los extremeños»

El 21 de diciembre los extremeños están llamados a las urnas. Son los primeros comicios de este nuevo ciclo electoral que se abre en España, y para Óscar Fernández, el candidato de Vox, que augura un apoyo muy importante para su partido, lo que ocurra en ellos va a trascender lo regional.

Nacido en Cáceres, ha vivido toda su vida allí, asegura que lleva la tierra «muy dentro», estudió enfermería, aunque muy pronto se introdujo en el mundo farmacéutico, donde lleva trabajando 25 años, y lo ha combinado con el mundo empresarial. Es presidente provincial de Vox en Cáceres y diputado autonómico desde las pasadas elecciones, donde la formación de Santiago Abascal obtuvo cinco escaños.

–¿Qué le llevó a entrar en política y a hacerlo con Vox?

–Yo no estaba afiliado a un partido político, al único que lo he estado es a Vox. La verdad es que la política siempre me resultó bastante ajena. Hasta que un día en las redes sociales, en YouTube en aquel entonces, conocí a Santiago Abascal y dije: este señor dice las cosas que a mí me interesan, las cosas que yo defiendo, las cosas por las que yo podría dar un paso a la política. Y me afilié a Vox.

A mí me atraía el poder ser útil y poder, sobre todo, defender esas ideas que hasta ahora no había visto reflejadas en ningún partido. La gente empezó a escuchar ese mensaje nítido que Vox lleva a los españoles y empezamos a crecer, a ser más, más y más. Me ofrecieron ser presidente provincial del partido en Cáceres hace seis años y ahora soy diputado autonómico en la Asamblea de Extremadura.

–Algunos están viendo en clave nacional las elecciones de diciembre, que abren el ciclo electoral en toda España. ¿Comparte esa visión?

–Es evidente que son las primeras de un ciclo que va a haber ahora. Por primera vez los extremeños vemos que España nos mira, que se centra en nosotros y eso creo que es un aliciente y un acicate muy importante. Es evidente que lo que pase en Extremadura va a trascender por primera vez nuestras fronteras. Por lo tanto, estamos muy ilusionados porque además nuestro proyecto creemos que va a tener un respaldo muy, muy, muy importante.

Lo vemos en la calle, vemos el cariño que nos muestran, que le muestran a Santiago Abascal y al partido cuando hacemos cualquier tipo de acto en la calle. Y creo que lo que pase en Extremadura va a ser muy importante para las sucesivas elecciones que haya, incluso también en las nacionales, donde auguro, por supuesto, un crecimiento exponencial de Vox. No porque yo sea un optimista redomado, sino porque el calor de la calle nos indica que así va a ser.

El campo extremeño está absolutamente abandonado gracias al Pacto Verde, a la Agenda 2030 y a todas las políticas que emanan de esas dos agendas

–¿Cuáles son a su juicio los principales problemas que ahora mismo tiene Extremadura?

–El principal problema de Extremadura es que llevamos 42 años de gobiernos socialistas. Y digo bien 42 años, porque son 36 años de gobierno socialista del PSOE y seis años de gobierno socialista del PP. El PP cuando ha gobernado no ha revertido ni una sola de las políticas y mucho menos de las leyes socialistas.

Y los problemas concretos de Extremadura, en primer lugar, el campo extremeño está absolutamente abandonado gracias a la agenda globalista, al Pacto Verde, a la Agenda 2030, a todas las políticas que emanan de esas dos agendas que están machacando literalmente el campo extremeño. Además, están fomentando una competencia desleal de países terceros en ámbitos tan diversos como el tomate, el arroz, la miel...que son muy importantes para el campo extremeño. También en la ganadería.

Tenemos un déficit que lo conoce todo el mundo, clamoroso, sobre las infraestructuras que le faltan a Extremadura, y que ha impedido que Extremadura crezca como han crecido otras regiones a las que los gobiernos centrales del PP y del PSOE, del bipartidismo, sí que han premiado en este caso. Tenemos problemas claros en cuanto a los servicios públicos, fundamentalmente en la Sanidad y la Educación. Tenemos una región muy rural donde es muy difícil dar una cobertura acorde a lo que necesitan los extremeños en cuanto a asistencia sanitaria; tenemos a los docentes en huelga porque cobran infinitamente menos que la media nacional. Y tenemos un problema con Almaraz; es la primera industria de Extremadura, y el PSOE quiere cerrarla y el PP también la ha querido cerrar, pero ahora ha virado y ahora dice que quiere mantenerla, aunque realmente sabemos que lo dicen simplemente al albur de las encuestas, porque fueron ellos los que cerraron Garoña y los que están manteniendo la política de fanatismo climático verde que han demonizado en este caso la energía nuclear y Almaraz.

Y por supuesto, todavía no tenemos un problema, como en otras regiones de España, pero tenemos un problema incipiente de inmigración que va a hacer que se colapsen, como está pasando en muchas regiones, los servicios públicos. Seguimos teniendo los mismos problemas hoy que teníamos hace dos años y medio, cuando Guardiola empezó a gobernar, hace diez, cuando estaba gobernando el PSOE y hace 40, cuando empezó el sistema autonómico.

–Si después del 21 de diciembre Vox llegara al Gobierno, ¿qué medidas aplicaría con más urgencia?

–Nosotros vamos a hacer y a pedir exactamente lo mismo que hemos hecho durante estos dos años y medio de legislatura. Somos un partido que no cambiamos al albur de las encuestas. En primer lugar, una oposición total y frontal a ese Pacto Verde y a esa Agenda 2030, que están machacando el campo extremeño. En segundo lugar, queremos que se haga efectiva una bajada de impuesto real. Las medidas cosméticas que ha llevado a cabo el PP son absolutamente insuficientes.

Por supuesto, reclamar no solo al Gobierno central, que también, pero también el esfuerzo al Gobierno autonómico para que haga esas infraestructuras que necesitan los extremeños para crecer y que nos han sido robada durante durante 40 años. Por supuesto, una oposición total a la inmigración ilegal masiva que estamos sufriendo poco a poco también en Extremadura.

Y eliminación del gasto superfluo; Extremadura pierde millones de euros en políticas que pueden ser perfectamente eliminadas. La Agencia Extremeña de Cooperación Extremeña se lleva 12 millones de euros todos los meses y lleva los recursos de los extremeños fuera de Extremadura, cuando es de las regiones más pobres de España. La señora Guardiola no ha desmontado ni uno solo de los chiringuitos que durante 40 años ha ido hilando el PSOE. Nosotros vamos a llevar ese dinero a lo que realmente necesitan los extremeños, a mejorar su sanidad, la educación y a que realmente gracias a ello los jóvenes extremeños puedan tener la oportunidad, si ellos quieren, de quedarse en Extremadura.

–Ustedes señalan que esta convocatoria electoral es un «capricho» de María Guardiola. La dirigente popular en su momento achacó este adelanto a un bloqueo del que acusaba a su partido, a Vox. ¿Qué posibilidad real ve de poder llegar a un acuerdo? ¿Cree que Guardiola puede variar su posición respecto a los planteamientos que ustedes pusieron sobre la mesa para negociar los presupuestos y que en ese momento rechazó?

–Bueno, nosotros somos un partido tremendamente previsible. Vamos a defender exactamente lo mismo el día 22 de diciembre que defendemos el día 20. María Guardiola ha llegado a estas elecciones porque ha querido, porque no ha querido suscribir un acuerdo que han suscrito sus propios compañeros del PP en otras comunidades, porque en Extremadura hemos planteado las mismas propuestas que en Murcia o en Valencia.

Ella es la única que bloquea Extremadura. En cuanto a las posibilidades de acuerdo, está en su mano. Pase lo que pase, si los extremeños a Vox nos dan la fuerza que nos han dado o incluso mayor, como parece que nos van a dar, vamos a poner encima de la mesa exactamente lo mismo que hemos puesto cuando estábamos negociando los Presupuestos que ella ha rechazado, las mismas medidas. Será ella la que tenga que decidir si las acepta o no, porque nosotros no la vamos a cambiar. Somos fieles a nuestros votantes. Por el bien de Extremadura, queremos que haya un acuerdo, pero tiene que ser un acuerdo para que en Extremadura llegue el cambio que ella prometió y que no ha cumplido.

–¿Pedirían volver a entrar en el Gobierno?

–Nosotros vamos a esperar a ver cuál es la fuerza que nos dan los extremeños, que insisto, estoy seguro de que va a ser mucho mayor de la que tenemos en la actualidad, y luego ya se verá si vamos a entrar en el gobierno o si no, porque lo primero son las elecciones. Nosotros no vamos a hacer como hace el PP, que ya se está repartiendo las consejerías.

Lo que sí puedo garantizar puedo garantizar es que nosotros no vamos a traicionar la confianza que deposite cualquiera de los extremeños en nosotros. Defenderemos nuestro programa el día 22 con toda la fuerza que nos den los extremeños y luego ya veremos qué pasa.

Si los extremeños nos dan la fuerza que nos han dado o mayor, vamos a poner encima de la mesa lo mismo que cuando estábamos negociando los Presupuestos que María Guardiola ha rechazado

–Uno de los temas también clave en esta campaña es que el candidato del PSOE está procesado en el caso del hermano de Pedro Sánchez. ¿Qué resultado augura para los socialistas? ¿Cómo se ve desde allí esta situación? Porque vimos el otro día al propio Sánchez apoyando a Miguel Ángel Gallardo en un mitin…

–Que el señor Gallardo, que está imputado por gravísimos delitos, sea el candidato del PSOE es un insulto a todos los extremeños, incluidos también a sus afiliados y a sus votantes. Un auténtico insulto. Creo que el PSOE va a sufrir un retroceso claro, es evidente. Tiene un candidato procesado y creo que es la primera vez que se da en España una situación similar.

El señor Gallardo es la cara de lo que es ahora mismo el PSOE. Es un fiel reflejo de lo que es el PSOE, que pone como candidato a la presidencia de la Junta de Extremadura a un señor imputado aún más que presunto delincuente para, insisto, insultar a todos los extremeños. No me cabe duda de que hay una parte de su electorado que le va a castigar. Pero también es verdad que tiene un suelo en Extremadura tremendamente alto y que va a seguir teniendo unos resultados que escapan a toda lógica teniendo el candidato que tienen.

–Ustedes se erigen como la alternativa al «menú bipartidista», y acusan tanto al PSOE como al PP de aplicar las mismas políticas. ¿Qué cree que hace diferente a su partido?

–Bueno, es que el bipartidismo, el PP y el PSOE son lo mismo porque los hechos nos llevan a esa conclusión. Han gobernado durante 42 años en Extremadura. Empezó esta carrera de las comunidades autónomas siendo la última y seguimos siéndolo. El PSOE del imputado Gallardo y la señora Guardiola han pactado los presupuestos de la Diputación Provincial de Cáceres del año 25; esta semana pasada han vuelto a pactar los presupuestos de la Diputación para el 2026. Han pactado los presupuestos, los que están vigentes ahora mismo, del Ayuntamiento de Cáceres, que es el segundo más importante de la región. Y han negociado los presupuestos de la Junta de Extremadura del año 25. Estuvieron negociando los presupuestos y llegaron a un acuerdo, que al final, por unas enmiendas no se llegaron a presentar. Pero es que hace un mes y medio estaban negociando los presupuestos y cuando nosotros propusimos esas medidas de cambio para poder aprobarlos, el Gobierno del PP despreció esas medidas que nosotros les hicimos llegar pocas horas después de hacérselas llegar y dijeron que iban a seguir negociando con el PSOE.

Por lo tanto, ese bipartidismo es mucho más que un eslogan, es una realidad que se sustenta en hechos y no en hechos de hace diez años, en hechos de gobiernan juntos en Europa, que lo hacen, no en hechos de que aquí en Madrid se repartan TVE, el Tribunal de Cuentas...Es que si bajamos a Extremadura, son parte de lo mismo. Por lo tanto, ¿qué cambio pueden esperar los extremeños de un partido, el PP, que pacta todo con el PSOE, desde Bruselas hasta Cáceres?