El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, y el portavoz de Vox, Alejandro Nolasco
Vox recalca que sus exigencias en Aragón están en la misma línea que en Valencia y avisa al PP: «No tendrá cheque en blanco»
El portavoz, Alejandro Nolasco, le entregó un dossier con medidas como una bajada radical de impuestos, la supresión de las subvenciones a entidades que apoyan a la inmigración ilegal y a sindicatos o de las tasas derivadas del Pacto Verde
Aragón podría ser la próxima región que celebre elecciones autonómicas. Todo dependerá de si hay acuerdo o no para los presupuestos de 2026, que el año pasado tuvieron que ser prorrogados porque no lo hubo. El presidente aragonés, el popular Jorge Azcón, empezó esta semana la ronda de contactos y este martes se reunió con el portavoz de Vox, Alejandro Nolasco, que le hizo entrega de un dossier con sus medidas para los presupuestos y señaló que son reivindicaciones que van «en la misma línea» que los compromisos que adquirió el Gobierno de la Comunidad Valenciana, con Juanfran Pérez Llorca a la cabeza, y que posibilitó el respaldo de Vox a su investidura. Y por tanto es un planteamiento que considera que «debería ser encajado por el PP de Aragón».
En concreto, aludió a algunos de estos compromisos que los populares sí aceptaron en Valencia y a los que aludió Pérez Llorca, como «cero ayudas públicas para aquellas organizaciones que incentivan o facilitan la inmigración irregular», que se reformen o eliminen «cargas y tasas autonómicas derivadas del pacto verde que no aporten nada y solo condenen al sector», o «no tener reparo en conocer los datos reales de delincuencia ni el origen de quienes cometen delitos». «Bajo este marco nos gustaría llegar a un acuerdo de presupuestos adaptado a Aragón para 2026», afirmó Nolasco, que advirtió al presidente regional: «Si lo que quiere es un cheque en blanco, eso no lo va a tener. Negociar no es dar un cheque en blanco».
El dirigente de Vox pide que el Gobierno autonómico les entregue el proyecto entero de los presupuestos para analizarlo desde el punto de vista técnico y también, que fije un calendario de reuniones con las consejerías como primer paso para negociar. Asegura que su voluntad es llegar a un «acuerdo coherente y razonable que no compromete al Gobierno de Aragón a nada que no haya firmado el PP» en la Comunidad Valenciana. No obstante, indicó ayer que a la luz de las declaraciones de el propio Azcón y su Ejecutivo estos días «parece que hay una distancia del PP a que se replique lo que se ha hecho en Valencia. «La pelota está en el tejado de ellos», recalcó.
Entre las medidas que recoge ese dossier que Vox ha entregado ya al Gobierno de Azcón se encuentran una bajada radical de impuestos, para facilitar el acceso a la vivienda o apoyar a las familias con deducciones del IRPF, o al sector primario; la supresión de todas las subvenciones a las ONGs que apoyen la inmigración ilegal, y de las que reciben los sindicatos; o la elaboración de un plan de retorno de inmigrantes irregulares. Por otro lado, quiere que se eliminen todas las tasas derivadas del Pacto Verde, que se establezca un plan de limpieza de las riberas y actuaciones en el cauce del Ebro así como que se planifiquen obras hidráulicas ante el riesgo de inundaciones.
También propone Vox que se establezca la prioridad nacional en el acceso a las ayudas; la creación de una oficina para las víctimas de la okupación, otra para menores víctimas de violencia y otra para proteger a los mayores; la supresión de las partidas derivadas de la Agenda 2030, así como de la ideología de género en los colegios; y la eliminación de las partidas presupuestarias dedicas a LGTBI, entre otras medidas.