El PSOE se instala en el negacionismo mientras se hunde: «El sanchismo está más fuerte que nunca»

La derrota es enteramente de Miguel Ángel Gallardo y Pedro Sánchez está más fuerte que nunca. Ése es, grosso modo, el mensaje que este lunes lanzó la portavoz del PSOE desde la sede de Ferraz. Porque el objetivo de los socialistas en estas horas posteriores a la catástrofe extremeña es claro: blindar al presidente frente a esta derrota y circunscribirla al ámbito regional. De hecho, esta tarde se espera que Gallardo formalice su dimisión frente a la Ejecutiva del PSOE de Extremadura.

Para el PSOE, en Gallardo empieza y acaba toda la responsabilidad. La rueda de prensa de la portavoz, Montse Mínguez, fue un monumento a la negación. Cero autocrítica, cero asunción de culpas. «Para todos aquellos que se levantarán hoy pensando que estamos tocados y hundidos: estamos más fuertes que nunca», sostuvo. «El sanchismo es el que está haciendo que España avance, que crezca. Y está más fuerte y vivo que nunca, y con más ganas que nunca», insistió.

La portavoz del PSOE hizo oídos sordos al clamor de los extremeños en las urnas, que propiciaron un triunfo histórico de la derecha: 60 % de voto frente al 36 % de la izquierda, 24 puntos de ventaja. Y también a los malos augurios que Extremadura deja al PSOE en lo referente a las próximas citas electorales en Aragón, Castilla y León y Andalucía. «El PSOE sale siempre a ganar, vamos a dar la batalla. Estamos más fuertes y convencidos de que somos más necesarios que nunca».

Mínguez cargó contra el PP por «blanquear un partido antidemocrático, que juega al trumpismo», y situó al Gobierno de Sánchez como «dique de contención». Aunque si algo han demostrado los resultados en Extremadura es que la estrategia de agitar el miedo a Vox ya no le funciona al PSOE, ni siquiera en una comunidad sociológicamente de izquierdas como ninguna otra. De hecho, la enorme abstención de los votantes del PSOE fue uno de los clavos en el ataúd político de Gallardo. «En este país hay miedo a Vox», insistió, aun así, la portavoz socialista. Ésta se despidió de los periodistas cantando «feliz Navidad», como si no hubiera pasado nada.

El PSOE está empeñado en fingir que esta derrota no es también, o sobre todo, de Pedro Sánchez. El propio presidente convocó este lunes a las 8.30 horas una declaración sin preguntas desde la Moncloa para anunciar la nueva portavoz de su Gobierno, Elma Saiz, y la nueva ministra de Educación, Milagros Tolón, con el objetivo de cambiar el foco cuanto antes.

En esa breve comparecencia no hizo una sola alusión al siniestro total del PSOE en Extremadura, algo que le reprochó Movimiento Sumar. «Tras unas elecciones en las que el PSOE pierde casi un 15% del voto y firma su peor resultado en Extremadura, Sánchez decide actuar como si nada hubiera pasado», lamentó Lara Hernández, que también criticó la elección de la nueva portavoz. «No es una decisión de lectura política: es una huida hacia adelante. No es un cambio de rumbo: es negación de la realidad», sentenció.