Ilustración del líder del PSC, Salvador Illa, en frente de la bandera independentista catalana
El laberinto catalán
Las administraciones gobernadas por socialistas subvencionan la 'Universitat Catalana d’Estiu'
La Diputación, el Ayuntamiento de Barcelona y el Consell Insular de Menorca financian un curso que aclama a Laura Borras, defiende la absorción de Baleares, el sur de Francia y la Comunidad Valenciana por parte de Cataluña, y la declaración unilateral de la independencia
Desde hace 54 años todos los veranos se celebra en Padres, un pueblo de 6.000 habitantes en el sur de Francia y a pocos kilómetros de la frontera española, la llamada 'Universitat Catalana d’Estiu' (UCE), un curso de verano que año tras año reúne a unos pocos cientos de militantes procedentes del ala más radical del separatismo. El programa ha conseguido celebrase los últimos cuarenta años gracias a que más del 90 % de sus gastos son financiados con subvenciones de diversas administraciones, entre ellas varias gobernadas por socialistas, como la Diputación de Barcelona, el Ayuntamiento de la Ciudad Condal o el Consell Insular de Menorca.
La edición de 2023 se ha celebrado durante esta semana bajo el título «Països Catalans, Europa, Espanya: conflictes, aspiracions, possibilitats» (Países Catalanes, Europa, España; conflictos aspiraciones, posibilidades). A lo largo de la semana han pasado por la UCE líderes y referentes del independentismo como; Alex Salmond, ex líder del SNP y promotor del referéndum por la independencia de Escocia que tuvo que dimitir acusado de 14 delitos de abuso sexual, o Laura Borras, expresidenta del Parlament de Cataluña, quien también fue apartada del cargo, en este caso por corrupción, y que llevó a cabo la clausura del curso impartiendo una conferencia bajo el título: «¿Tiene límites el parlamentarismo?». En ella abogó por la acción directa y por no limitar la búsqueda de la independencia al marco legal, sino por la vía de la presión popular.
A lo largo de la semana han pasado por Prades líderes empresariales como Joan Font -director general de Bon Preu- habitual en este tipo de eventos dado que su cadena de supermercados es políticamente muy activa a pesar de que su patrimonial se trasladó a Madrid en noviembre de 2017 justo, después de las dos declaraciones de independencia fallidas llevadas a cabo por Carles Puigdemont.
Otro de los platos fuertes de la UCE fue la mesa redonda sobre universidades. Bajo el título «El sistema universitari del Països catalans i el futur de la Universitat catalana» (El sistema universitario de los Países Catalanes y el futuro de la Universidad Catalana). La consejera de Universidades de la Generalitat de Catalanuña, Gemma Geis, de Junts per Catalunya, compartió panel con todos los rectores de las universidades públicas catalanas pero sin la participación de consejero ni rector alguno de universidades de Baleares o de la Comunidad Valenciana, a pesar de que el título de su panel, desde su ensoñación política, les afectaba.
Otro de los ponentes estrella fue el consejero de Salud de la Generalitat de Cataluña, también de Junts per Catalunya, Josep Mª Argimon, quién tiene en su consejería a cuatro altos cargos imputados por negarse a vacunar contra el covid a policías nacionales y guardia civiles destinados a Cataluña.
Más de un 90 % de financiación pública
La UCE tiene para este año un presupuesto de 403.607 euros, de los que el 90,5 % procede de subvenciones públicas, la mayoría de ellas otorgadas por diversas consejerías de la Generalitat de Cataluña, pero también por administraciones gobernadas por el Partido Socialista. Así, la Diputación de Barcelona, presidida por la alcaldesa de L’Hospitalet, Nuria Marín (PSC), quién gobierna en coalición con Junts per Catalunya, otorgó a la UCE 20.000 euros. Marín es miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE. El Consell Insular de Menorca, presidido por Susana Mora Humbert del PSIB-PSOE entregó a la UCE 3.000 euros, y el Ayuntamiento de Barcelona donde el socialista Jaume Collboni es Teniente de Alcalde en el gobierno de Ada Colau, asignó una subvención a la UCE de 6.321 euros.
El total subvenciones recibidas por la UCE alcanza los 365.287 euros. En cambio, las matrículas de los 348 participantes solo suponen 19.770 euros del total ingresos. Es evidente que la UCE sin el apoyo de subvenciones públicas de administraciones en manos tanto socialistas como de partidos independentistas sería cosa del pasado por falta de interés.
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