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06 de mayo de 2024

El candidato del PP a las elecciones catalanas, Alejandro Fernández

El candidato del PP a las elecciones catalanas, Alejandro FernándezEuropa Press

Cataluña

Fernández entiende la «nostalgia noventera» de algunos empresarios con Junts, pero recuerda su deriva radical

El dirigente 'popular' considera que no se pueda mejorar la financiación autonómica mientras continúe el «procés»

El candidato del PP a la Generalitat, Alejandro Fernández, entiende que haya una cierta «nostalgia noventera» entre algunos empresarios, de cuando se llegaban a acuerdos con la antigua CiU. «Éramos muy felices e inconscientes de lo que se nos venía encima», ha dicho Fernández, quien también ha asegurado que comprende que «busquen eso, pero no llega», entre otras cosas, por la deriva radical «y cada vez peor» de los herederos de Convergencia, de Junts.
Así lo ha asegurado durante su intervención en el Foro Europa - Tribuna Barcelona, en la que ha insistido en la idea de que Junts ha pasado a ser un partido regionalista a «un movimiento nacional populista de corte supremacista, con una retórica salvaje y agresiva». Y ha añadido: «que no busquen al moderado de Junts. De hecho, cada vez llega uno peor».
En definitiva, para Fernández, eso es como buscar al unicornio. Y ha puesto como ejemplo, que si parecía imposible superar a Carles Puigdemont, apareció Torra, a quien sucedió Laura Borràs y ahora Míriam Nogueras. «Quién será el siguiente», se ha preguntado y ha apostillado: «No me lo puedo imaginar».
Es la respuesta que ha dado cuando le han preguntado por la posibilidad de reunirse con Carles Puigdemont. Fernández ha dicho que siempre se ha mostrado favorable al «acuerdo político», pero manteniendo «las reglas del juego». Y ha recordado que él ha gobernado con Convergència en la Diputación o el ayuntamiento de Tarragona. Pero «cuando negociábamos lo hacíamos de tú a tú, con respeto mutuo», y por este motivo, ha dejado claro de que él no puede sentarse con alguien «que ya te dice que eres un colono fascista representante del estado opresor».

Falta «confianza» para la financiación

Es por este motivo, entre otras cuestiones, por la que considera que no hay la «confianza suficiente» para mejorar la financiación de Cataluña. Ahí está el proceso independentista: «es imposible tener la confianza necesaria para tener un reparto para el conjunto de España, con una parte que dice que declarará mañana la independencia». Y es que, según Fernández, cualquier mejora de financiación se tiene que basar en el acuerdo y la confianza.
Y también en clave económica ha denunciado el «infierno fiscal» de Cataluña. Por este motivo, ha anunciado que si llega a la Generalitat, deflactará el IRPF, suprimirá el impuesto de sucesiones «de inmediato»; incrementaría, de entrada, el límite exento a 700.000 euros en el impuesto de patrimonio con el objetivo de eliminarlo; y también suprimiría el canon del agua, el impuesto de las bebidas azucaradas o el del CO2.
Por lo demás, también ha insistido en la necesidad de la interconexión del Ebro con Barcelona «con extracciones puntuales» de agua con los excedentes del CAT. Es viable, ha asegurado, y «en ocho meses se puede resolver el problema». También ha dejado claro que cualquier extracción de agua del Ebro debe ir acompañada de la correspondiente inversión en el Delta del Ebro para evitar su regresión.
Y, en este sentido, ha lamentado que «los ayatolás que nos gobiernan, ni agua, ni regresión». De hecho, recuerdan que la interconexión de cuencas ya se debería haber hecho en tiempos de Montilla, pero no quiso asumir esa obra, y tampoco lo han abordado los gobiernos de la Generalitat posteriores.
Fernández ha estado acompañado en este conferencia por la plana mayor del PP catalán. Estaban el número dos de su candidatura, Manuel Reyes; el secretario general del PP, Santi Rodríguez, la eurodiputada Dolors Montserrat o el alcalde de Badalona, Xavier Garcia Albiol.
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