El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Energía y Transición Ecológica, Sara Aagesen
La vicepresidenta Aagesen se desentiende de la dana de Valencia y lleva casi un año sin responder a la Generalitat
Cero reuniones en casi un año. Ese es el balance de la coordinación entre el Gobierno de Pedro Sánchez y la Generalitat Valenciana para gestionar la reconstrucción tras la dana en materias que atañen al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y a la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio. Entre la vicepresidenta Sara Aagesen y el conseller Vicente Martínez Mus no ha habido ni un encuentro formal para establecer cómo Valencia debe volver a la senda de la normalidad en materias ciertamente sensibles. El representante valenciano, por mucho que insista, no ha sido recibido ni por la actual ministra ni por su antecesora Teresa Ribera.
Según ha podido saber El Debate, Martínez Mus ha insistido en reiteradas ocasiones para formalizar una reunión para coordinar la estrategia de reconstrucción en las áreas en las que coincide con Aagesen, pero la respuesta ha sido el silencio.
Sara Aagesen accedió al cargo de vicepresidenta del Gobierno y ministra el 25 de noviembre de 2024, casi un mes después de la mayor tragedia natural que ha sufrido la Comunidad Valenciana. En diciembre visitó l'Albufera de Valencia y ahí coincidió puntualmente con Martínez Mus, quien pudo llevar un simple intercambio de palabras con la señora ministra. Y ya está.
En 10 meses no ha habido un nuevo encuentro entre ambos representantes y tampoco la Generalitat ha obtenido respuesta a las diversas peticiones para analizar cara a cara la gestión con respecto, por ejemplo, a la necesidad de agilizar las obras de encauzamiento de barrancos que llevan años de retraso y hubieran minimizado el impacto de las riadas.
Con el silencio por respuesta y el calendario corriendo con normalidad, casi un año después de la tragedia Martínez Mus no se ha podido reunir ni con Teresa Ribera, más centrada en su 'ascenso' a vicepresidenta ejecutiva para una Transición Limpia, Justa y Competitiva en la Comisión Europea, ni con Sara Aagesen. Y eso que parece que hay temas candentes que tratar.
La única reunión que ha habido entre la Conselleria de Mus y el Ministerio de Aagesen ha sido un encuentro puntual del conseller con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morant. Eso sí, haciéndole esperar al representante valenciano cerca de ocho meses.
El reparto de competencias no coincide a la perfección en los organigramas de Generalitat Valenciana y Gobierno central, es por ello que Martínez Mus igual tiene que solicitar reiteradamente una reunión con Aagesen como con Óscar Puente. Con uno de los ministros más polémicos del Gobierno la coordinación fluye, según ha podido saber El Debate, hasta el punto de que sí ha existido una coordinación a la hora de reconstruir el transporte y las infraestructuras afectadas. Entre ambos departamentos se contabilizan una docena de reuniones en el marco del grupo de trabajo conjunto de Infraestructuras creado tras la dana.
Pregunta en el Congreso
Unos tanto y otros tan poco. Con esta disparidad de criterio que complica la reconstrucción global de Valencia tras la riada, el grupo popular en el Congreso ha registrado una pregunta parlamentaria para pedir explicaciones al Gobierno y a la ministra Aagesen.
A fecha 1 de octubre se presentó ante la Mesa del Congreso una serie de cuestiones para que la vicepresidenta Aagesen detalle en el hemiciclo esta falta de encuentros con la Generalitat Valenciana para gestionar la coordinación de la reconstrucción en cuestiones medioambientales.
Diferentes diputados populares cuestionan a la vicepresidenta para que aclare los motivos por los cuales la no da cita al conseller y si tiene previsto atender la solicitud de entrevista llegada en varias ocasiones desde la Generalitat Valenciana.
La reconstrucción avanza pero en ciertas áreas está bloqueada por cuestiones, aparentemente, políticas. Con once meses sin reuniones y con el silencio administrativo por bandera se antoja complicado que se puedan desatascar obras que evitarían una gran riada como la que sufrió Valencia el 29 de octubre de 2024.