'Busco a Jacq’s', Macron divide a Francia con su posado pecho lobo

Con imagen de pesho loboh (leer con acento andaluz de guasa, s’il vous plaît) al actual presidente de la República vecina se le ha ocurrido que su fotógrafa oficial, Soazig de la Moissonniere, le retrate con un escote que parece salido del mismísimo «Planeta de los Simios».

A pocos días de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas, los candidatos parecen estar de los «mismos nervios». Desconozco el nivel de pelo en pecho previo de Macron, pero llegar a estas elecciones con semejante matojo puede que no le guste a los/las más jovencitos, si bien por encima de los 40 la cosa puede funcionar. Si se trata de algún tratamiento específico, debería comercializar con su imagen una vez que deje palacio, porque el potingue puede funcionar.

Las fotos le muestran relajado, sentado a lo «John Wayne» y aparentemente relajado (lo dudo, lo dudo…). Otras imágenes del reportaje le muestran corriendo escaleras arriba como el verdaderamente sexy JFK: no cuela. También se ofrecen perfiles tipo despacho oval con pose Robert Kennedy durante la la presidencia de su hermano.

¿Es este efecto Zelenski lo único que puede aportar un presidente que tras años en El Elíseo esta semana ha avisado que tiene algunas ideas estupendas para el futuro de Francia? El chico es mono, sí, pero las campañas se ven reducidas a cortos o a tiktoks de segunda. En lo que está quedando la «grandeur de la France». Cada día sus políticos se parecen más a algunos de los nuestros.