El Príncipe Harry y Meghan Markle, a su salida de la misa en honor a la Reina en la catedral de San Pablo de Londres el pasado sábado
El Príncipe Harry y Meghan Markle vuelven a casa tras su discreto paso por Reino Unido
El matrimonio y sus dos hijos aterrizaron este domingo en California después de asistir a los actos en honor a la Reina por su Jubileo de Platino
Llevaban dos años alejados de la Familia Real y su regreso a Reino Unido con motivo del Jubileo de Platino de la Reina Isabel II prometía acapararlo todo. Sin embargo no ha sido así. El Príncipe Harry y Meghan Markle tenían muy claro que se mantendrían en un discreto segundo plano para no eclipsar a la verdadera protagonista de estos cuatro días de festejos en los que no han faltado nada: el tradicional desfile Trooping The Colour, un espectacular encendido de luces, una misa en honor a la Monarca en la catedral de San Pablo de Londres, una carrera de caballos y hasta un concierto con estrellas de talla mundial.
Los Duques de Sussex han cumplido con su palabra y su reaparición ha sido de lo más discreta. Y como llegaron, se fueron. Este domingo, el matrimonio y sus dos hijos, Archie y Lilibet, aterrizaron en California sin esperar a que finalizase el último de los festejos en honor a la abuela del Príncipe por sus 70 años en el trono. Según ha publicado el Daily Mail, fueron trasladados en coche desde Frogmore Cottage, donde se alojaron este fin de semana, hasta el aeropuerto de Farnborough, al oeste de Londres, para subirse al avión privado que les llevó a casa.
Fue el jueves, en el desfile de Trooping The Colour, cuando se les pudo ver por primera vez. Aunque no participaron en el acto por deseo de la Reina al no ser miembros activos de la Familia Real británica, sí estuvieron viéndolo desde la ventana del famoso balcón. Al día siguiente fue su reaparición oficial en la catedral de San Pablo de Londres. Entre abucheos y algún que otro apoyo de los curiosos que se acercaron a la zona, la pareja subió la escalinata del templo sin soltarse en ningún momento la mano. Cuando terminó la misa salieron igual de discretos y sin que las cámaras captasen ningún reencuentro con el Príncipe Guillermo ni Catalina de Cambridge.
Meghan Markle y el Príncipe Harry, en la misa en honor a la Reina Isabel II
Pero además de esos dos actos, los Sussex no volvieron a aparecer públicamente. Celebraron una íntima fiesta de cumpleaños para su hija Lilibet por su primer cumpleaños el sábado en el jardín de Frogmore Cottage, pero no existen imágenes de nada. Sí se sabe que acudieron algunos miembros de la familia pero poco más. Tampoco existen pruebas fotográficas del paso por Reino Unido del pequeño Archie y su hermana. Así lo han querido los Sussex, que miden al milímetro cada aparición de sus pequeños.
A su regreso a California, la pareja proseguirá con su vida a la espera de que salga la biografía del Príncipe Harry, que promete ser otro escollo en la relación con su familia. Se ha podido saber que será muy crítico con algunos miembros, lo que «sacudirá el núcleo de la Monarquía británica», como así desvela la prensa local.
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