Quién es el nuevo novio de Sara Carbonero y a qué se dedica

Desde aquel beso mundialmente famoso tras la final de Sudáfrica 2010, Iker Casillas y Sara Carbonero parecían destinados a protagonizar el cuento de hadas moderno. Pero como todo cuento, tuvo su punto final: el 12 de marzo de 2021, la pareja anunció su separación tras más de una década juntos, dos hijos, un infarto, un cáncer… y muchas portadas. Hoy, tres años después, sus caminos van tan por separado que hasta sus vacaciones parecen dos series distintas: ella, en Cádiz, con empresario estable; él, en Cartagena, con fotogramas que huelen a salseo.

Mientras la periodista disfruta de su primer verano junto a José Luis Cabrera, un empresario canario de perfil discreto, el exguardameta del Real Madrid ha optado por una ruta más internacional. Cabrera fue presentado por su amiga inseparable, Isabel Jiménez —periodista, presentadora de Informativos Telecinco y comadre de Sara—, y desde entonces, la relación ha ido tomando forma a paso firme: paseos en la playa, abrazos compartidos y, lo más significativo, la presencia de los hijos de la periodista.

Actualmente él trabaja como consejero de una empresa familiar agrícola llamada Grupo Bonny y además, también fue gerente del Patronato de Turismo de Fuerteventura.

Al otro lado del charco, Casillas ha convertido sus vacaciones en una crónica visual con misterio incluido. Cartagena de Indias ha sido solo una de las paradas de su tour, donde ha publicado imágenes desde clubes exclusivos como Bora Bora Beach Club, entre aguas cristalinas y atardeceres de postal. «Pues no me voy, no me voy a ir, me quedo un día más», escribió en uno de sus posts más comentados. Pero la foto más analizada no fue la suya… sino otra: la de Juliana Pantoja Beltrán, la psicóloga colombiana que, casualmente, subió una imagen en el mismo lugar, con el mismo arco de acceso a la zona VIP. ¿Coincidencia? ¿Despiste? ¿Mensaje cifrado? Que cada uno saque sus propias conclusiones.

Juliana, hasta hace poco completamente desconocida en España, trabaja en el sector sanitario en Bogotá. Y el exfutbolista insiste en que solo es una amiga especial más.

Mientras tanto, fundadora de Slow Love parece haberle cogido el gusto al amor sereno, a los veranos sin sobresaltos y a la compañía de amigas como Raquel Perera o Marta Girón de Solá, en una costa gaditana que huele más a calma que a titulares. La manchega —que ya no necesita demostrar nada a nadie— se toma la vida con otra filosofía: sin prisas, sin ruido y disfrutando del presente. Eso sí, antes de llegar a esta nueva etapa, también hubo capítulos previos. Kiki Morente (2021–2022), cantaor, protagonizó un romance breve pero muy mediático con la periodista. Después, Nacho Taboada (2022–2023), músico también, con quien compartió algo más que acordes y tardes tranquilas por Madrid.

La historia entre Iker y Sara ya no es un «ellos», sino dos vidas completamente distintas que siguen provocando titulares —por razones muy diferentes—. Ella posa abrazada a su pareja y sus hijos, rodeada de paz. Él se sumerge en playas paradisíacas con compañía cambiante y narrativa incierta.