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29 de marzo de 2024

"Isabel la Católica en la cartuja de Miraflores" Grabado de un cuadro de Luis Álvarez

'Isabel la Católica en la cartuja de Miraflores', de Luis Álvarez, una de las mujeres más importantes de la historia de España.©KORPA

Día de la Mujer  Estas fueron las mujeres más importantes de la historia española: líderes, santas e inconformistas

Con motivo del 8 de marzo, Día de la Mujer, desde El Debate recordamos a cinco mujeres que con su entereza, valentía e inconformismo cambiaron la historia

Desde siempre ha existido un genio femenino que cambia y sostiene el mundo. Mujeres que, con creatividad, su ingenio, su esfuerzo y con su audacia han provocado cambios grandes y, otros desconocidos, pero esenciales para sostener su familia, su trabajo, su propia vida y para cambiar su entorno.
Con motivo del Día de la Mujer desde El Debate recordamos a cinco mujeres que con su entereza, valentía e inconformismo cambiaron el rumbo de la historia.

Isabel I, 'La Católica'

Retrato de Isabel la Católica

Retrato de Isabel la Católica

Hija de Juan II de Castilla e Isabel de Portugal el jueves 22 de abril de 1451. Tuvo una profunda religiosidad que desde muy pequeña demostró una sorprendente profundidad en sus convicciones cristianas. Nadie podría imaginar el papel tan grande que lograría desempeñar en la vida de Castilla y en la consolidación y difusión de la religión católica.
Su paso al poder no fue cosa fácil que en último término debió la Corona de Castilla a los que la apoyaban, pero que después de su victoria en la guerra de sucesión, gobernó de tal manera que logró legitimar a posteriori su reinado. Y posteriormente la unión dinástica tras su boda con Fernando de Aragón supuso una transformación en la variedad de reinos de la España medieval en un cuerpo político con una sola dirección, una sola diplomacia, un solo ejército. Con los Reyes Católicos, España se convierte en una nación fuerte, dinámica y expansiva.
Isabel la Católica reinó durante 30 años en los que su gran determinación la colocó en el trono; su fe la llevó a conquistar el Reino de Granada que seguía contando con una población mayoritariamente musulmana y conseguir numerosos bautismos. Su intuición favoreció al gran proyecto que realizaría Cristóbal Colón quien recibió el apoyo incondicional de la reina para una travesía que propiciaría el descubrimiento de América. La reina Isabel se ganaría el título de precursora de los Derechos Humanos por su gran labor en la defensa de la igualdad de los súbditos americanos.

Santa Teresa de Jesús

Detalle del retrato de santa Teresa de Jesús por Eduardo Balarca

Detalle del retrato de santa Teresa de Jesús por Eduardo BalarcaReal Academia de Historia

Toda su vida tuvo que hacer frente a una triple limitación sociocultural y religiosa: era mujer y monja en una época en la que la cultura dominante, el saber, el poder tanto en la sociedad como en la iglesia estaba totalmente controlada por hombres.
A lo largo de su vida dejó una obra literaria importante, llegando a escribir 437 episodios, obras místicas y numerosos poemas, cantares y villancicos. Destacan 4 grandes libros: Vida, Moradas, Camino de perfección y Fundaciones.
En 1560, disgustada por la indisciplina de las carmelitas, decidió con el apoyo del Papa reforma la congregación para volver a la auténtica clausura, a una vida de pobreza y austeridad absoluta. Con el dinero de familiares y amigos, como la duquesa de Alba, y el apoyo de San Juan de la Cruz, reformador de la orden masculina, se creó la primera comunidad de las Carmelitas Descalzas de San José. Viajó sin descanso y llegó a fundar 17 conventos por toda España.
Sin embargo, su renovación también le costó la persecución llegando a comparecer ante el Tribunal de la Inquisición en 1575. De esta manera para defender su obra trató con reyes y la nobleza y realizó todo lo que hizo falta para proteger los conventos que sembró. La vida de esta santa fue intensa, agitada, con grandes alegrías y sufrimientos. Tuvo su gran conversión a la edad de 40 años cuando comenzaron sus visiones místicas. Su alma fue tan misionera que lloró amargamente en la necesidad que había de evangelizar la recién descubierta América. En su camino se cruzaron y tuvieron gran importancia personajes como san Juan de la Cruz, con el cual colaboró estrechamente, así como san Pedro de Alcántara y san Francisco de Borja.

Inés Suárez

Doña Inés Suárez en la defensa de la ciudad de Santiago por José Mercedes Ortega

Doña Inés Suárez en la defensa de la ciudad de Santiago por José Mercedes Ortega

Se casó con 19 años y ordenó a Inés que aguardara su regreso. Sin embargo, su preocupación por su marido, que había embarcado rumbo a Panamá, consiguió que el rey le otorgase una licencia para partir al Nuevo Mundo. Una vez en Perú, recibió la desagradable noticia de que su esposo había muerto en la Batalla de las Salinas (un decisivo conflicto militar entre las fuerzas de Hernando y Gonzalo Pizarro contra las de Diego de Almagro por la disputa por la posesión de la ciudad de Cuzco).
Destrozada por la muerte de su esposo, decidió quedarse y trabajar cuidando a los soldados heridos, lavando y cosiendo sus ropajes; pues tampoco en España le quedaba nada. Su vida cambiaría al conocer a Pedro de Valdivia, militar y conquistador español que formó parte de las huestes de Francisco Pizarro, gobernador del Perú. Tal fue la confianza de Valdivia en Inés que cuando la ciudad de Santiago fue amenazada por el ataque de miles de indígenas, este acudió a ella.
«Cuando la situación era desesperada y los españoles comenzaban a flaquear y cedían terreno ante la indiada que asaltaba la residencia del gobernador », escribe Juan Eslava Galán en La conquista de América contada para escépticos.
Inés se dio cuenta de que el rescate de los cabecillas sería razón para alentar la sublevación de los nativos por lo que salió del hospitalillo y dirigiéndose a la prisión con espada en mano, lideró a los soldados, reaccionando ante el caos y la confusión y mató a siete caciques prisioneros logrando que los atacantes se retiraran. La ciudad de Santiago no sucumbió.

Emilia Pardo Bazán

Retrato de Emilia Pardo Bazán, c. 1869

Retrato de Emilia Pardo Bazán, c. 1869Biblioteca Lázaro Galdiano

Fue una lectora ávida desde los ocho años, a los nueve ya escribió sus primeros versos y con 15 su primer cuento Un matrimonio del siglo XIX, que sería el primero de casi 600 cuentos que publicaría a lo largo de su vida. Se casó con 16 años con José Quiroga y Pérez Deza, también aristócrata. Durante años ambas familias recorrieron España, dónde Pardo Bazán se iba empapando de la situación de la mujer y de su propio país.
En 1881 publicaría Un viaje de novios en la que se inspiró en las experiencias de un viaje a Francia, cuyo prólogo será importantísimo para comprender lo que significa el naturalismo en la obra de Pardo Bazán, al igual que una serie de artículos publicados entre 1882 y 1883 bajo el título de La cuestión palpitante y que darían a conocer el naturalismo como corriente literaria en España.
Emilia Pardo Bazán es una figura reconocida en la vida literaria, cultural y social. En 1908 empezará a utilizar el título de Condesa de Pardo Bazán que Alfonso XIII le otorgó por su importancia en el mundo literario. Es considerada una de las mejores escritoras de la literatura española y precursora del naturalismo en España.

María Zambrano

María Zambrano

María Zambrano

En los primeros meses de 1939 se vieron obligados a abandonar España casi un millón de personas pertenecientes a las más variadas condiciones sociales e ideológicas en un largo exilio marcado por la incertidumbre y el desarraigo. María Zambrano fue la última gran pensadora en regresar a su patria tras una vida repleta de luces y sombras.
Se matriculó en la Universidad Central de Madrid para estudiar Filosofía llegando a convertirse en una de las mejores alumnas de Ortega y Gasset. Rompió con todos los estereotipos femeninos de la época: se vinculó a la política una vez terminado sus estudios y fue una clara defensora de los derechos de las mujeres.
La poesía fue la vía por la que María Zambrano consiguió canalizar su característica filosofía, dando lugar a la Razón Poética. Nadie antes se había planteado aunar estos dos conceptos para que pudieran convivir de una forma tan dulce y pura. El exilio marcó su vida y su obra, que quedó ligada a la distancia y a la nostalgia que siempre sintió por regresar a su patria, reflejado en obras como Delirio y destino, España, sueño y verdad, Claros del bosque o Los bienaventurados.
Se convirtió en una de las pensadoras más importantes del siglo XX. A su regreso a España comenzaría una nueva etapa de actividad intelectual dedicándose a la reedición de obras ya publicadas y a la escritura de numerosos artículos. Su gran obra se vio culminada en 1988 cuando le otorgaron el Premio Miguel de Cervantes de Literatura.
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