Los militares agrupados en el Movimiento Patriótico por la Salvaguarda y la Restauración (MPSR) confirmaron hoy que han tomado el poder en un golpe de Estado en Burkina Faso y que han depuesto al presidente, Roch Kaboré, tras dos jornadas de gran incertidumbre y confusión en este país de África occidental.
Los golpistas aseguraron que la toma del poder se llevó a cabo «sin derramamiento de sangre y sin ningún tipo de violencia física sobre las personas detenidas, que se encuentran en un lugar seguro y respetando su dignidad», aunque no precisaron si entre esos arrestados se encuentra el depuesto presidente, de 64 años.