Fundado en 1910
Trump durante su discurso en la ONU

Trump durante su discurso en la ONUAFP

Trump reprende a Europa por comprar petróleo a Putin: «Financian una guerra contra ellos mismos»

El mandatario también ha asegurado que el reconocimiento del Estado palestino «es una recompensa para Hamás»

«Una era de estabilidad se ha convertido en una de las grandes crisis de nuestro tiempo», así ha resumido el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el tiempo que ha pasado entre su última comparecencia en una Asamblea General de la ONU, hace cinco años, y la actual. Sin embargo, el republicano insiste en que estamos «en la era dorada de América». «Estados Unidos tiene la mejor economía, el mejor Ejército, las mejores fronteras», resumía el mandatario.

El presidente estadounidense, que ha tenido que improvisar parte de su discurso tras un fallo en el teleprompter –también ha arremetido contra los problemas en un ascensor–, ha aprovechado su comparecencia para tratar multitud de temas, desde la inmigración a los conflictos que asolan la franja de Gaza o Ucrania, además de su reciente lucha contra el narcotráfico venezolano.

Trump, el cuarto en intervenir este martes en la jornada de la ONU –después del secretario general de la ONU, António Guterres; la presidenta de la Asamblea General, Annalena Baerbock y el presidente de Brasil, Lula da Silva–, ha lanzado un alegato en contra de la inmigración «que destruye a los países» y donde ha guardado unas especiales palabras de elogio hacia el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, y su postura en ese aspecto. «O se van a la cárcel o regresan por donde han venido», ha recalcado.

«He puesto fin a siete guerras», ha recordado el presidente – una afirmación que lleva semanas repitiendo y que no es del todo cierta– «y no he recibido ninguna llamada de las Naciones Unidas para ofrecerme ayuda». Posteriormente, el mandatario ha cargado contra la República Islámica de Irán, afirmando que «el principal patrocinador del terrorismo en el mundo no puede tener armas nucleares» y recordando la operación militar estadounidense que tuvo lugar hace unos meses en el país persa, cuando bombardearon las instalaciones nucleares iraníes.

«He estado trabajando para un alto el fuego en Gaza, pero Hamás sigue rechazando nuestras ofertas de paz. Estos días algunos países han reconocido unilateralmente reconocer el Estado de palestina, pero eso es una recompensa muy grande para los terroristas de Hamás», ha asegurado el mandatario que ha insistido en que la organización islamista libere a los rehenes.

«También tiene que parar la matanza en Ucrania, creía que esa sería la guerra más fácil de parar por mi buena relación con Putin, pero a veces nos llevamos sorpresas. Rusia no está quedando bien, esto debería haber sido cuestión de días», ha dicho el presidente sobre la invasión en Ucrania. El mes pasado intensificó sus esfuerzos reuniéndose primero con Vladimir Putin en Alaska y, tres días después, con Volodimir Zelenski y otros líderes europeos en la Casa Blanca, aunque las negociaciones siguen sin llegar a buen puerto.

«China está financiando esa guerra comprando petróleo ruso, algo inexcusable. Los propios países de la OTAN tampoco lo han hecho, están financiando una guerra contra sí mismos. ¡A quién se le ocurre algo así!», ha enfatizado Trump.

«Europa está siendo invadida por inmigrantes ilegales y nadie hace nada para expulsarlos. Mirad Londres, donde el alcalde es de lo peor, y quieren imponer la sharía. Cada país tiene el derecho a reconocer sus fronteras», ha afirmado posteriormente el presidente que ha retomado la cuestión de la inmigración y ha puesto su gestión en Estados Unidos como ejemplo para tratarla.

«Los terroristas venezolanos y las redes de tráfico que dirige Nicolás Maduro son un gran problema, por eso hemos usado la fuerza del Ejército. Cada barco que hundimos llevaba drogas que mataría a 25.000 estadounidenses y no dejaremos que ello suceda», ha dicho sobre el conflicto con Venezuela y las narcolanchas que Estados Unidos ha hundido en los últimos días.

Por último, el mandatario también ha confirmado que se reunirá la semana que viene con Lula da Silva –las relaciones entre Estados Unidos y Brasil están en la cuerda floja tras la condena al expresidente Jair Bolsonaro–.

comentarios
tracking

Compartir

Herramientas