Vehículos de movilidad personal
Usuarios de patinete se quejan de trato discriminatorio por parte de Renfe
Renfe se suma así a ciudades como Madrid, Barcelona o Londres y prohíbe meter estos vehículos en sus trenes por el riesgo de incendio
En solo unos meses los patinetes han tomado las calles y aceras de las ciudades españolas y europeas, generando evidentes problemas de convivencia con los peatones. Lógico si tenemos en cuenta que se trata de vehículos eléctricos que pesan hasta 30 kilos y se desplazan a 25 kilómetros a la hora.
A pesar de estar involucrados en decenas de accidentes al año en los que fallecen entre 10 y 15 personas, el verdadero peligro de los vehículos de movilidad personal (VMP) no es este, sino que la verdadera amenaza está en sus baterías.
Bombas incendiarias
Tal y como explican los bomberos, se trata de pequeñas bombas de fuego que causan decenas de incendios al año. De hecho hace sólo unas semanas el Metro de Madrid tuvo que evacuar uno de sus convoy y dos estaciones de Metro tras el incendio de un patinete en el interior de un vagón.
El problema añadido es que estos incendios son muy difíciles de apagar, pues una vez que comienzan a arder las baterías hay poco que hacer, simplemente dejar que se consuman.
De hecho los bomberos explican que nunca hay que cargar las baterías de estos vehículos en una casa, pues durante este proceso se eleva de manera importante el riesgo de incendio.
Renfe también los prohíbe
A raíz de esta explosión, Metro de Madrid prohibió que los viajeros puedan llevar patinetes a bordo, exactamente lo mismo que acaba de prohibir Renfe recientemente, tanto en cercanías como en larga y corta distancia y en alta velocidad.
De esta forma Renfe se suma así a una decisión que han adoptado ya ciudades como Londres o Hamburgo.
La medida entra en funcionamiento el próximo 12 de diciembre y ha provocado ya la queja airada de la Federación de Vehículos de Movilidad Personal (Fevenmp), que denuncia la decisión por discriminatoria, «pues no afecta a otros dispositivos con batería». Una decisión que «limita la libertad de movimientos a 10 millones de usuarios».