El limpiaparabrisas trasero es mucho más útil de lo que parece

El limpiaparabrisas trasero es mucho más útil de lo que parece

Práctico

¿Te pueden poner una multa por no tener limpiaparabrisas trasero?

Algunos conductores explican haber sido sancionados por no tener limpiaparabrisas trasero, ¿es realmente obligatorio llevarlo?

Se trata de una duda habitual de miles de conductores que se ha hecho viral en redes sociales ante el supuesto caso de un conductor que denuncia que la DGT le ha puesto una multa de 200 euros por no tener limpiaparabrisas trasero.

Lo primero que hay que matizar es que de acuerdo con el artículo 11 del Reglamento General de Circulación tan sólo es obligatorio los limpiaparabrisas delanteros, por lo que no debería pasar nada si el coche viene homologado sin él, otra cosa es si se lo quitamos.

Cuestión de homologación

Entonces pueden comenzar nuestros problemas, por ejemplo en la ITV si el limpiaparabrisas trasero no funciona puede considerarse un defecto leve, pero si nos han arrancado un trozo y queda el brazo roto al aire con aristas cortantes podría ser grave, suspenso, lo que nos obligaría a repararlo.

Si nos lo arrancan y quedan aristas no sería legal

Si nos lo arrancan y quedan aristas no sería legal

Por último, y tal y como muestra el vídeo es difícil encontrar un consenso, pero es cierto que la Guardia Civil está multando por no llevar el limpiaparabrisas trasero.

Criterio del agente

Se trata de una reforma que hacen muchos conductores que no lo usan y lo quitan por motivos estéticos, en este caso queda a criterio del agente poner una multa por una infracción grave o no.

La multa que denuncia este conductor

La multa que denuncia este conductor

En este último caso debemos tener en cuenta que es una multa que podremos recurrir posteriormente, pues en principio el conductor tendría todas las de ganar, siempre eso sí que no haga uso del derecho de pronto pago, pues entonces no podrá recurrirla de ningún modo.

El limpiaparabrisas trasero es muy útil e importante cuando llueve mucho, pues mejora la visibilidad posterior del conductor de manera muy importante. Lo que parece mentira es que haya conductores que estén dispuestos a renunciar al mismo por un motivo puramente estético aunque ello comprometa su seguridad al volante y la de los ocupantes.

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