Afortunadamente no es lo normal, pero en ocasiones cargar el coche es un lujo
Electrificación
Más caro que la gasolina 98: el ‘atraco’ de repostar coches eléctricos fuera de casa
El precio del kilovatio en algunos cargadores está disparado de manera incomprensible, especialmente los que están ubicados en carreteras y sin alternativas de recarga cercanas
Este artículo no va de defensores del coche eléctrico ni de ‘odiadores’ profesionales, va de denunciar un hecho que está ocurriendo en España y que contribuye a que el coche eléctrico este sufriendo la oposición de un colectivo importante de conductores que denuncian algunos de sus principales problemas.
Lo primero que conviene matizar es que técnicamente los coches eléctricos son excelentes, creo que nadie hubiera soñado hace una década con los coches eléctricos que tenemos hoy en día en las carreteras españolas.
Los coches: sobresaliente
Las marcas han hecho un esfuerzo titánico en materia financiera para que estemos ante la generación de coches más avanzados que ha existido jamás en materia tecnológica, de hecho el salto dado en los coches en una década ha pasado por delante a varias generaciones de automóviles.
Tesla usa tarifa dinámica, que cambia en función de horas, días, demanda...
El problema es cuando el ecosistema que rodea al coche eléctrico es el que no está a la altura y eso ocurre en España con la red de carga. Es cierto que se están multiplicando los cargadores día a día y que hoy en día ya rondan los 50.000 pese a las dificultades que ponen las eléctricas e Industria para poner en funcionamiento los cientos de cargadores que ya están desplegados sin homologar.
Dos años de homologación
Luchas internas entre eléctricas, petroleras, fabricantes e incluso el Gobierno hacen que agilizar este proceso haya sido imposible en años y que cualquier empresa que quiera instalar cargadores tarde hasta 24 meses en poder inaugurarlos, de hecho la tecnología ha quedado obsoleta cuando tienen la licencia.
Otro de los problemas es el precio de las recargas, pese a que en teoría una de las ventajas del coche eléctrico es que moverse es infinitamente más barato que con los de combustible, la realidad dice lo contrario.
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Es cierto que cargando en casa es prácticamente gratis si disponemos de placas solares y muy barato pagando el kilovatio, con un coste de entre uno y tres euros cada 100 kilómetros, pero el problema es cuando cargamos en la calle y en carretera.
Cargadores de carretera
Tal y como denuncia este usuario, en una electrolinera de Tesla le han cobrado 0,61 euros por kilovatio, y no es su tarifa máxima.
Si comparamos un compacto eléctrico medio como el VW ID.3 que consume 15,3 kWh a los 100 kilómetros con 170 caballos y un VW Golf TSi equivalente con 150 caballos y lo repostamos con gasolina 98, descubriremos que sale más barato echar gasolina que cargar la batería.
Así, con el ID.3 recorrer 100 kilómetros nos costará 9,3 euros, mientras que en el caso del Golf y repostando gasolina 98 a 1,60 euros/litro nos costará 8,9 euros, teniendo en cuenta que el consumo del Golf es de 5,6 litros a los 100 km, en ambos casos homologados.
Ni que decir tiene que la comparativa contra el Golf TDi humilla al eléctrico, con un coste a los 100 kilómetros hablaríamos de 6,9 euros. Obviamente pagar el kilovatio a 0,61 euros no es lo habitual, pero tampoco debería ser ni excepcional y puede verse incluso más caro en carretera.