
Collage de Réquiem por Nagasaki, Cinco defensores de la fe y la razón y el clásico de novela fantástica Eifelheim
Tres libros (no religiosos) que hablan de Dios desde la ciencia
La filóloga y profesora de la Universidad CEU San Pablo Mar Velasco propone, en el último número de la revista La Antocha, editada por la ACdP, tres obras que muestran la relación entre ciencia y fe
El ensayo, la filosofía, el testimonio histórico y hasta la ciencia ficción pueden ser inmejorables catalizadores para encontrar, no sólo un puente que una (o mantenga a prudente distancia) ciencia y fe, sino, sobre todo, para buscar, encontrar, defender, rumiar, reflexionar y proponer apasionadamente la verdad.
Sobre esta premisa, la filóloga Mar Velasco, profesora de Humanidades en la Universidad CEU San Pablo, ha planteado tres sorprendentes recomendaciones literarias en la revista La Antorcha, para abordar la relación entre fe y razón.
En concreto, Velasco se detiene en Réquiem por Nagasaki, Cinco defensores de la fe y la razón y el clásico de novela fantástica Eifelheim, para ilustrar diferentes aspectos de este binomio entre la fe católica y el progreso científico, sobre el que gira el último número de La Antorcha, la revista gratuita que edita la Asociación Católica de Propagandistas.
'Réquiem por Nagasaki', de Paul Glynn
Agosto de 1945, la II Guerra Mundial no ha terminado. Estados Unidos sigue batallando con Japón, que aún no se ha rendido. De pronto el fuego inolvidable –nombre que los japoneses dieron a la bomba atómica– arrasa las ciudades de Hiroshima y Nagasaki dejando más de doscientas cuarenta mil víctimas. Entre los que sobrevivieron dolorosamente a aquel 9 de agosto de 1945 estaba Takashi Nagai, un científico japonés, experto radiólogo y pionero de esta especialidad que más tarde le causaría una leucemia irreversible. La lectura de Pascal mientras estudiaba la carrera de Medicina llevó a Nagai a un largo proceso de búsqueda que culminó en su conversión al catolicismo. En Réquiem por Nagasaki, Paul Glynn –un misionero australiano que ha vivido muchos años en Japón– traza como un viaje memorable el camino de Takashi Nagai desde el sintoísmo y el ateísmo hasta la fe católica, redescubriendo el sentido del sufrimiento y el misterio del dolor, del perdón y de la cruz.
'Cinco defensores de la fe y la razón', de Richard Bastien
Fe y razón, teología y filosofía, ¿deben necesariamente convivir y trabajar juntas? ¿Son indispensables la una para la otra? ¿Es científico negar la existencia de Dios? ¿Hay un campo legítimo de conocimiento para la fe? A todas estas preguntas intenta dar respuesta Richard Bastien en este libro a través del análisis de cinco grandes del pensamiento y la antropología filosófica: J.H. Newman, G.K. Chesterton, C.S. Lewis, Peter Kreeft y Alasdair MacIntyre. Cuenta el autor que lo que le ha impulsado a estudiar a estos autores es que «habiendo crecido en el seno de una cultura protestante perfectamente adaptada a nuestro mundo secularizado, han percibido sus carencias intelectuales y morales, y han descubierto la riqueza de una tradición católica perfectamente cómoda con las adquisiciones de la ciencia, y no menos cuidadosa de preservar las verdades eternas». Una lectura imprescindible para involucrarse en el debate cultural.
'Eifelheim', de Michael Flynn
Esta novela, nominada en 2007 al Premio Hugo –los Nobel de la ciencia ficción–, relata un hipotético encuentro entre una civilización extraterrestre y los habitantes de un pueblo de la Alemania del siglo XIV. El autor pone el acento en la figura del sacerdote Dietrich, que hará de nexo entre los humanos y estos visitantes con forma de insectos gigantes: los krenken. Dietrich será el encargado de intentar que ambas especies –humanos y krenken– lleguen a una convivencia pacífica. Es entonces cuando surge la pregunta: ¿pueden salvarse los krenken?, ¿tienen dignidad «humana», necesidad de salvación? La cuestión ante una posible llegada de «los otros» no es nueva y la han abordado desde Padres de la Iglesia como san Jerónimo a intelectuales cristianos como C.S. Lewis, e incluso recientemente el Papa Francisco en una homilía: «Si mañana llegara una expedición de marcianos verdes, con esa nariz larga como los pintan los niños y uno dijera: `yo quiero el bautismo´… ¿Qué pasaría?».