León XIV saludando a fieles en Castelgandolfo
El Papa apunta a África: Argelia se perfila como su próximo destino apostólico
En su primer viaje internacional, León XIV también dejó caer que España podría entrar en escena para una visita. «Podéis tener más que esperanza», dijo a los periodistas españoles
El primer viaje de León XIV ya es historia. El Pontífice ha regresado este martes, 2 de diciembre, a Roma después de seis días de visita a Turquía y al Líbano, dejando entrever, a mitad del vuelo, cuál podría ser la próxima escala de su agenda internacional.
Sin confirmar fechas ni rutas, sí deslizó un deseo claro: África. Y dentro del Continente, un país que ocupa un lugar especial en su pensamiento y en su visión de diálogo interreligioso: Argelia.
«Espero hacer un viaje a África. Posiblemente sea el próximo», confesó a los periodistas a bordo del avión. Y fue más allá, precisando su motivación personal: visitar los lugares vinculados a san Agustín, figura profundamente respetada en territorio argelino y que el Papa considera «un puente» entre cristianos y musulmanes.
Mientras tanto, Hispanoamérica aguarda. El Papa reconoció abiertamente su deseo de viajar a Argentina y Uruguay, visitas largamente esperadas, y mencionó también la puerta abierta a Perú, aunque sin proyecto definido.
¿Y España?
En su primer viaje internacional, León XIV también dejó caer, con esa mezcla de cercanía y humor que ya define sus encuentros con la prensa, que España podría entrar en escena. «Podéis tener más que esperanza», dijo a los periodistas españoles.
Y, aunque no hay nada decidido, el calendario ofrece dos ocasiones de peso: la posible presencia del Pontífice en Barcelona en 2026, con motivo de la finalización de las obras de la Sagrada Familia —coincidiendo con el centenario de la muerte de Gaudí—, y el VIII Centenario de la catedral de Toledo. Dos efemérides que, sin marcar un rumbo definitivo, sí colocan a España en la órbita de los destinos plausibles.
Mientras tanto, el Pontífice ha decidido pasar la jornada de este miércoles en Castelgandolfo, algo que ya se está convirtiendo en una costumbre semanal para descansar, antes de regresar esta noche a la Ciudad del Vaticano y cerrar así su primera salida internacional. Pero lejos de bajar el ritmo, ya piensa en el siguiente paso. Y si algo dejó claro en el vuelo de vuelta es que África podría ser el escenario donde impulse una nueva etapa de su diplomacia pastoral.