Los tres errores comunes que pueden arruinar tu piel al volver a la rutina
Durante el verano, nuestra piel se enfrenta a múltiples agresiones que debilitan su barrera protectora y aceleraron el envejecimiento. En septiembre, con la vuelta a la rutina, vuelven las visitas a consultas para recuperar estos excesos y son muchos los errores cometidos. La Dra. Marta Vilavella, dermatóloga fundadora de Idermic dermatología médica y estética, afirma: «Creer que la piel sólo se protege del sol en verano es un gran error, el fotoprotector, la hidratación y los tratamientos no invasivos deben formar parte de nuestra rutina».
El primer error es olvidarse del protector solar. Los profesionales aseguran que aunque hayan terminado los días de playo y piscina, el sol sigue siendo un factor a tener en cuento en nuestra piel. Debemos seguir una rutina de mantenimiento y usar siempre fotoprotección. Además, muchas veces cometemos el error de no reaplicar con la frecuencia necesaria. Esto genera daño acumulativo, manchas y pérdida progresiva de luminosidad en la piel.
Falta de hidratación
En segundo lugar, la Dra. Marta Vilavella afirma que no hay que olvidarse de la importancia de la hidratación. «La mezcla de sol, cloro y sal, generan un gran impacto en nuestra piel. Esta quedo deshidratado y debilitada, y a pesar de ello solemos seguir con rutinas poco nutritivas y sin una reparación profunda. La hidratación debe ser un básico en nuestro día a día a pesar de reducir nuestra sensación de calor».
Tratamientos caseros agresivos
Recurrir a exfoliaciones o tratamientos caseros agresivos es el tercer error. En un intento por «renovar la piel» después del verano, muchos recurren a este tipo de tratamientos que sobrecargan la barrera cutánea, lo que puede causar más sensibilidad e irrigación, afirma la profesional. Lo recomendable es acudir a tratamientos no invasivos de recuperación como un HIFU Liftero que estimula la producción de colágeno y mejora la firmeza, la textura y la luminosidad de la piel. Actúa desde dentro, estimula la producción de colágeno sin agredir la epidermis que puede estar dañada y deshidratado.