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20 de mayo de 2024

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ChatGPT diagnostica una enfermedad que 17 doctores no fueron capaces de detectar

Desesperada, la madre del menor decidió buscar en internet. Fue entonces cuando descubrió la herramienta que salvaría la vida de su hijo pequeño

Los doctores hacen una gran labor, pero no siempre aciertan con el diagnóstico en la primera consulta. Es el caso de Alex, un niño de siete años que ha visitado a 17 profesionales sin ningún éxito. Sus dolencias comenzaron en 2020, cuando la niñera alertó a la madre Alex –nombre del niño– que cada día le tenía que dar un ibuprofeno para frenar los fuertes dolores que sufría. Desesperada consultó a la IA, acertó.
Los hechos comenzaron durante la etapa más dura del coronavirus, el confinamiento. Alex comenzó a sentir dolores muy fuertes, pero no sabía de donde venían. Según explica el medio Today, que entrevistó a la madre, el niño, que ya tiene 7 años, empezó a masticar muchas cosas. Pensaban que era dolor de muelas, así que acudieron al dentista. Tras varias revisiones no dieron con el diagnóstico.
Semanas después, sus padres vieron que Alex había dejado de crecer, por lo que le llevaron al pediatra. El profesional atribuyó la falta de desarrollo al confinamiento. La madre no se quedó conforme, por lo que le realizaron otro chequeo en 2021. El facultativo le derivó a la fisioterapia porque «parecía tener desequilibrios entre el lado derecho e izquierdo».
Las dolencias de Alex empeoraban. Antes de ir al fisio comenzó a experimentar fuertes dolores de cabeza. Acudieron al neurólogo y éste le dijo que tenía migrañas. Tras este especialista acudieron al otorrinolaringólogo para ver por qué el pequeño no descansaba por las noches, creían que era problema de las vías respiratorias.
El fisioterapeuta pareció dar con el diagnóstico. «Parece tener malformación de Chiari», le comunicaron a los padres. Esta enfermedad es una condición congénita que causa anomalías en el cerebro donde el cráneo se une con la columna. Fallaron.
Hasta 17 especialistas tuvieron que visitar para saber qué tenía Alex. Desesperada, la madre del menor decidió buscar en internet. Fue entonces cuando descubrió el ChatGPT. Se creó un registro e ingresó la información médica que poseía. Finalmente, descubrió el síndrome del cordón anclado y se unió a un grupo de Facebook donde familias con niños con esta enfermedad contaban su caso, todos se parecían a los del pequeño.
Tras encontrar ella la respuesta, concertó una visita con el neurocirujano. Cuando vio los resultados tuvo claro qué le pasaba al niño: «Aquí hay espina bífida oculta, y aquí es donde está unida la columna», comentó. Síntomas que tiene el síndrome de la médula anclada. Cuando la madre del menor supo el diagnóstico, experimentó, asegura, «alivio, validación y entusiasmo por su futuro».
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