Una erupción solar
Ciencia
Así fue la tormenta solar más devastadora de los últimos 200 años: ¿qué consecuencias tendría en la actualidad?
Un evento similar podría dejar sin suministros de agua potable y electricidad a distintas regiones del planeta durante meses
En las últimas semanas, las principales agencias y entidades espaciales del planeta han puesto sobre aviso como consecuencia de las intensas tormentas solares protagonizadas por nuestra estrella. Estas fuertes llamaradas, capaces de generar aurorales boreales, podrían generar apagones masivos en todo el planeta. Esto no es algo nuevo, desde que comenzara 2025 nuestra estrella se encuentra en su pico de máxima actividad.
Cada 11 años aproximadamente el Sol atraviesa un ciclo realmente caótico, manifestado en distintas erupciones solares. Esto ocurre cuando dos ciclos magnéticos solares se superponen y compiten entre sí, provocando alteraciones violentas en la corona solar. Como resultado de este fenómeno se generan regiones en las que el campo magnético solar se abre al espacio, conocidas como agujeros coronales y traducidos en fuertes vientos solares.
Estos inmensos vientos serán más fuertes que nunca a lo largo del presente año, cuando el Sol entre en su «zona de combate» o «zona de batalla», con un mayor número de tormentas geomagnéticas intensas. Como consecuencia, los expertos ya aseguran que la actividad geomagnética podría aumentar un 50 % en la atmósfera superior de cara al año 2028.
Tormenta solar
En líneas generales, estos fuertes vientos pueden traer consigo tormentas solares más intensas, afectando las comunicaciones, los satélites y, en casos extremos, incluso la infraestructura eléctrica del planeta. De igual manera, los vientos solares derivados de esta zona de batalla pueden viajar a velocidades de hasta 700 kilómetros por segundo, poniendo en jaque a nuestros satélites, traduciéndose en fallos en la navegación aérea, marítima y terrestre.
¿Qué fue el 'evento Carrington'?
El intenso periodo que está atravesando el Sol no es nuevo, aunque la realidad es que en el pasado ya tuvo lugar una de las tormentas solares más intensas en la historia del planeta. En concreto, hace casi dos siglos —166 años para ser exactos—, un fenómeno sacudió nuestro planeta. Conocido como 'evento Carrington', una monstruosa tormenta solar —la más intensa registrada en la historia— provocó consecuencias insólitas en la Tierra.
En aquel lejano 1859, el astrónomo inglés Richard Christopher Carrington contempló unas manchas solares a través de su telescopio, siendo la primera persona que observaba directamente una llamarada solar. En aquel año se produjo un intensa tormenta que alcanzó su pico de intensidad entre el 1 y 2 de septiembre. Como consecuencia, se produjeron fallos en todos los sistemas de telégrafo de Europa y América del Norte, además de generar aurorales boreales y australes visibles en lugares inusuales.
¿Qué ocurriría actualmente?
Afortunadamente, tal como han explicado en varias ocasiones varios científicos, esta clase de episodios de nuestra estrella no suelen ser habituales, sucediendo dos veces cada milenio. Sin embargo, expertos como Pete Riley, de la Corporación Internacional de Aplicaciones Científicas (SAIC) en San Diego (EE.UU.), ya avisaron que la posibilidad de que ocurra un fenómeno similar en la próxima década es de un 12 %, por lo que la posibilidad existe actualmente.
En el caso de que una tormenta solar de tal magnitud ocurriera a día de hoy, los expertos señalan que varias regiones del planeta –especialmente aquellas cercanas a los polos– podrían verse muy afectadas, sin suministros de agua potable y electricidad durante meses.